Love Alarm | Hwang Hyunjin. (En edición)

OO1

Para Hyunjin despertarse temprano no se le hacía para nada genial, odiaba desvelarse y tener ojeras el día siguiente, la universidad tampoco era de su agrado.

— Te ves feo enojado. — dijo el joven a lado del castaño soltando una risa burlona intentando subirle los ánimos a su amigo, lo que recibió de su parte fue una mirada fulminante. —

Los pasillos de aquel lugar llenos de gente lo sofocaban en su totalidad, a penas y soportaba a los tontos que tenía por amigos, un pecoso parlanchín y un cara de ardilla, eran su compañía día a día.

Los tres amigos se separaron cuando llegaron a sus aulas que estaban una enfrente de la otra.

— Nos vemos después. — dijo el rubio despidiéndose de sus dos amigos, estos asintieron e ingresaron a sus aulas. —

El castaño frunció el ceño en cuanto aquella joven de baja estatura se paró enfrente de él con los ojos brillosos y una sonrisa adornando su rostro.

"No otra vez" se lamentó el joven y rodó los ojos, siguiendo con su camino ignorando a la joven sentándose en su puesto, al percatarse que la de piel blanca no se rendía chasqueó la lengua.

— Hyunjinnie oppa. — chilló la joven de nombre Yui, una japonesa muy bella pero no lo suficiente como para llamar la atención de Hwang Hyujin. — Acepta ir a esa fiesta conmigo. — hizo ojos de perrito. —

— No me gustan las fiestas. — se quejó por milésima vez en el día, peinó su cabello hacia atrás con sus dedos ignorando a la chica, esta se rindió y se terminó yendo, un suspiro salió de entre los labios del joven. —

— Hyunjin, la profesora de biología quiere verte. — un chico estudiante de lenguas extranjeras se asomó a la puerta del aula, Hyun asintió con la cabeza y fue detrás del joven que lo llevaría donde la mujer. —

Miles de preguntas pasaban por su mente entre una de las que más destacaba, "¿y ahora que hice?"

Al llegar al salón de maestros sonrió falsamente al ver a la mujer de gafas haciendo lo mismo.

— Se preguntará porque está aquí, ¿cierto? — el joven asintió con la cabeza, un tanto extrañado al ver la expresión de la mayor. — La redacción de su texto para el profesor de Literatura fue excelente, y me encantaría que me ayudara a redactar un texto, hablando sobre cualquier tema referente a la psicología, ¿puedo contar con usted para eso?

No tenía de otra, si quería seguirle agradando a esa mujer lo tenía que hacer, si o si. Él castaño terminó accediendo, y se retiró del lugar.

Al terminar su clase de las 8:00am, regresó a su casa, emprendiendo un largo camino porque se le antojaba caminar, manteniendo la mirada perdida en las hojas caídas en el suelo que eran pisadas por el mismo, llevando sus manos en los bolsillos de su sudadera negra, con miles de pensamientos y recuerdos que lo atormentaban, agradecía que por fin el viernes había llegado, sentía que no podía ni con su propia alma, acompañada de aquel vacío en su pecho.

— Hey, Hwang, ¿quieres venir al bar? Estamos todos, sólo faltas tú. — dijo el chico al otro lado de la línea, el mencionado froto sus ojos con el dorso de su mano y bostezó. —

— No empiecen sin mi. — soltó, de inmediato colgó la llamada después de escuchar la risa de su amigo. —

Solo se puso un pantalón negro, unos botines del mismo color y una camisa blanca holgada, arreglo su cabello y salió de la habitación y luego de su casa. Casualmente un taxi iba pasando, le hizo parada y se subió a este dando la respectiva dirección. Se bajó del vehículo no sin antes pagar, ingreso al bar que era visitado por sus amigos casi todos los viernes, mujeres y más mujeres bellas y con ropas provocativas rondaban en el lugar. El bar que antes era tranquilo ahora se había convertido en un prostíbulo.

— ¡hasta que llegas! — exclamó el pecoso al ver a su amigo acercase a ellos, Hyun sonrió y saludó con un choque de puños a los demás, le hicieron un espacio para que se sentará. —

— Vamos a beber hasta desmayarnos. — dijo el pelinegro de baja estatura alzando una botella de cerveza para luego ofrecerle una a Hwang quien la aceptó sin duda. —

— Hace ya tres días salió esta aplicación. — el mayor de todos mostró la pantalla de su celular. — Love Alarm.

— Que estupidez.

— Hyunjin, querido, puedes dejar de expresarte de manera tan vulgar por favor. — habló el rubio de forma burlona mientras bebía de la botella de cerveza, sus palabras provocaron las risas de los demás. —

— Me la instale recién ahora por la mañana, y sonó solo cinco veces en la universidad. — abultó sus labios y fingió llorar. —

— Al menos a ti te sonó, a mi no.

— Como se esperaba de nuestro pecoso australiano, es popular entre chicas y chicos. — dijo Chan, mostrando orgullo por su amigo. —

— Hwang, tú ligue a las dos. — Dijo Han, recibiendo una mirada extrañada por parte del mencionado, volteó su mirada a donde le indicó. —

Jeongin, el chico más lindo que había visto, estaba ahí, sonriendo alegremente.

— Esta si no te la crees.

— ¿uhm?¿ahora que? — pregunto molesto el castaño y bebió de la botella de cerveza que estaba por terminarse. —

— El niño ese trabaja aquí, ve y pídele sus servicios.

— Haber sus apuestas, a que no.

— A que si.

— Lo haré, solo esperen. — se levantó de golpe de su puesto dejando la botella de vidrio sobre la mesa. —

Se encaminó donde estaba el joven, quien al percatarse de su presencia sonrió aún más.

— ¿que te trae por acá, Hyunjin hyung? — el de baja estatura se posicionó frente a él de una manera un tanto provocativa para su gusto. —

— Deja las formalidades, cielo. Para ti soy Hyunjin. — tomó la mano del menor e intentó mostrar su sonrisa más sincera. — Esta noche quiero que me faltes el respeto. — susurró en su oído provocando que su piel se erizara de inmediato. —

— Mírenlo, todo un Don Juan.

— Se lo está llevando. SE LO ESTÁ LLEVANDO. — grito Han. —

— A que no le cobra. — sonrió burlón Changbin. — Agh, lo envidio, tendrá sexo con el chico que le gusta, que buena vida tiene. — se recargó en el sofá forrado de cuero, tomando de un solo sorbo lo que quedaba en la botella. —

— No digas "el chico que le gusta" — frunció el ceño Han. —

— Cierto, cierto, a Hyunjin aún le gusta Alexia. — el pecoso tomó una brocheta de carne del plato para comenzar a devorarla. —

...[🦋]...

Oda, lean mi nueva creación porfis. 😔

•Susi🥀