Capítulo 2

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Los dos habían despertado, JungKook se sobresalto un poco pero se relajo al acordarse que era Tae, se voltio y el rubio le tomó su mano sonriendole enternecido y enveslesado con la cara del peli negro.

-Buenos días...-Hablo y le dio un apretón a la mano que sostenía.

-Bueno días TaeHyung.-JungKook le dio una timida sonrisa, sintiendose un poco cohibido por haber despertado en esa situación. Sin duda no estaba acostumbrado a dormir a lado de alguien, o más bien, despertar al lado de alguien.

-Tu novio debe ser muy afortunada de tenerte y poderte ver a estas horas~-Sonrio mandándole un ataque a las bajas defensas de un JungKook recién levantado.

-No... No tengo novio...-Atino a decir mordiendo uno de sus labios, maña que tenía desde que no tenía memoria, hasta lo hacía inconscientemente.

-Mmm...-Un murmullo salió de la garganta del rubio, y junto a la vista de un JungKook mordiéndose los tentadores labios que tenía según Tae, una idea lo atacó. Y obvio que la iba a hacer.-Eso cambia muchas cosas...

-¿Que...?-Se corto la voz de JungKook a ver a Tae tomar su barbilla y acercarse peligrosamente a él.-¿Que... Que haces?-Exclamó sorprendido.

-¿No es obvio?-Todo los ojos divertido y se acercó aún más rozando sus labios.-Voy a besarte~

Y tan rápido como terminó la oración estrelló sus labios contra los del peli negro, el cual soltó un jadeo aún más sorprendido. Pero aún así su mano se colo en el cabello rubio y intensificó el beso, desesperando a igual que TaeHyung por probar los labios del otro y matar el deseo que los consumió desde que se vieron.

Los dos disfrutaron de los sabes labios del otro, haciendo un choque de lenguas, el rubio bajó su mano hasta la cintura de JungKook y lo acercó a él, metiendo una de sus manos debajo de su camisa acariciando su ancha espalda, JungKook se acercó a él dejando sus pelvis juntas y haciendo un movimiento de caderas, rozando sus miembros a través de los bóxer.

El beso se hizo más rápido y necesitado, TaeHyung se subió encima de JungKook y empezó a mover sus caderas y a besar el cuello blanquecino de su viejo amigo, mientras este suspiraba y jadeaba con los labios hinchados igual que el rubio

-Tae~-Tomo sus mejillas y de nuevo se fundieron en un demandante un beso, ambos excitados y con las polla erectas, tomando el choque de sus lenguas como un ligero consuelo.

El roce de caderas se hizo más intenso y los dos empezaron a gemir más fuerte, se sentían sensibles y el toque de él otro lo sentían de manera especial, diferente, más excitante y placentero.

-Ahg~-Tae gruñó ronco y mordió el labio inferior de JungKook, el cual soltó un alto gemido y abrió los ojos sorprendido al igual que el rubio, ambos miraron a sus entrepiernas, se habían venido y no habían ni tenido sexo en sí, eso nunca les había pasado con nadie. El otro era especial para el otro y viseversa, había una conexión inevitable y muy fogosa.

Aún agitados, el rubio siguió besando levemente el cuello de JungKook.

-Eso fue...-La voz de JungKook se escucho medio temblorosa, aun no creyendo haber acabado tan rápido, pero es que el toque de Tae fue como un fuego placentero en su piel.

Tae río y se quito sonriendo de lado.-¿Rapido? Yo estoy tan sorprendido como tu Pequeño Jeon...-Se acerco y dejo un corto beso en los labios de él peli negro.-Si sigues poniendo esa cara, voy a seguir haciéndote cosas.-Eso hizo que JungKook lo atacará una pena increíble, poniéndose rojo, sintiendose como un chico inexperto ante el rubio, el cual se veía tan dominante y sexy que dejaba bien aturdidos los nervios del Kook.

-Recuerdame no dejarte ir precioso.-Y con un guiño de ojo el rubio se encerró en el baño dejando a un mini JungKook undido en los pensamientos impuros que atacaban su mente si ubiera seguido ese encuentro con el Kim.

Aunque el "Recuerdame no dejarte ir" hizo que en su corazón una pequeña ilera de ilucion lo atrapará.

Mientras un TaeHyung se daba un baño sonriendo como un bobo y tocandose los labios aún con la sensación de los de él peli negro en ellos.

Roommates - TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora