Todas las tardes luego del almuerzo, 1 pm para ser exactos, pasaba el señor de los helados.
Mis amigos y yo corríamos al toque de la campana la cual sonaba con gran fervor por toda la cuadra, un día aquel hombre pasó más tarde de lo habitual, para ser exactos 6 pm, nuevamente mis amigos y yo corríamos intentando alcanzar al señor de los helados para disfrutar de dicho mangar que cualquier ser humano jamás podría resistirse.
Había un pequeño detalle que jamás vimos antes y esque el señor no escuchaba que lo estábamos llamando para hacer nuestra compra, muy intrigados tratamos de seguirlo lo más rápidos posibles, al darnos cuenta estábamos muy lejos de casa, no se cuantas cuadras estuvimos corriendo solo se qué se sentía todo diferente, habíamos entrado a un callejón y ya estaba oscuro.
Al darnos cuenta que era muy tarde, dimos la vuelta y decidimos regresar a casa pero eramos niños y todo estaba oscuro. Como el mayor de mis amigos decidí guiarlos aunque estaba perdido y confundido al igual que ellos, mientras caminábamos por las oscuras calles vimos nuevamente al señor de los helados que venía en dirección a nosotros lo cual nos puso de buen humor, la felicidad era grande y se notaba en nuestras sonrisas todo estaba bien... hasta que sentí que me encontraba completamente solo.
Mire a mí alrededor, no habían amigos, no había nadie allí, solo estaba yo y el señor de los helados. Me tomo de la mano y me dijo con una sonrisa, sube y vamos a tu casa pequeño...
Desde entonces han pasado muchos años y mí alma aún divaga por las calles ya no recuerdo donde quedaba mí casa, solo se qué ahora me había convertido en un señor, pero no en cualquier señor que verías por ahí sin tomarle importancia alguna, si no más bien me había convertido en el señor de los helados.
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Cortos de Terror
HorrorHola bienvenidos a una aventura llena de suspenso e intriga, donde jugaré un poco con sus mentes, historias de terror variadas por cada capítulo, espero sean de su agrado. Volví uwu.