💚💙Él no soy yo🖤❤️

Cap 7: Conociéndote 🍃

Ok, no podía tener respuestas de nadie por el momento así que no tenía de otra más que conseguirlas por si mismo, asunto de cuidado porque obviamente los demás tan dramáticos como eran verían atroz el acercarse a un humano cuando se es la Muerte sino es por cuestión de su alma.

Claro que no desatendió su trabajo para nada, pero siempre que podía pasaba un determinado tiempo observando al muchacho con suma atención para entender mejor sobre sus habilidades y saber sí sólo podía verlo o algo más.

Así fue como se metió en tan curiosa situación.

Sí pudieran verlo seguramente quedaría cuál acosador, sin embargo él sólo deseaba saber la verdad sobre la existencia de ése joven tan particular, al principio no parecía nada fuera de lo normal y hasta llegó a creer que perdía su tiempo, pero cuando menos lo espero él humano mostró algo que ciertamente lo impresionó. Sabía muy bien sobre que los mortales resultaban impredecibles, la mayoría de veces para mal lamentablemente pero habían excepciónes con extraordinarias cualidades y ése joven no fue la excepción, en poco tiempo demostró ser toda una caja de Pandora.

Por un lado sus contras eran el ser alguien ansioso, con una terquedad que competía con la de vanidad cuando se le metía algo en la cabeza, sumamente impulsivo, inseguro, algo distraído por no decir descuidado, ligeramente bipolar, nunca podía quedarse quieto y como cereza del pastel una sensibilidad muy parecida a la suya.

No estaba muy seguro de sí esto último era bueno o malo realmente.

Por otro lado sus pros contaban con, ser buena persona, amable, alegré, optimista, ingenioso, inteligente, trabajador, desinteresado, sabía escuchar así como dar buenos consejos, era siempre sincero aunque doliera, leal, divertido, ocurrente, con ganas de comerse al mundo, abierto a nuevas opciones, maduro, decidido, no soportaba ninguna injusticia,  jamás juzgaba sin conocer, emprendedor  sí se trataba de algo que realmente quisiera, bondadoso, inocente, tan soñador ...

No podría terminar la larga lista de cualidades que tenía.

Todas las veces en que lo miraba desde lejos veía hasta la más mínima expresión y juraría ya habérselas aprendido todas, no estaba muy seguro pero apostaría a que llevaba un mes observándolo, sabía trabajaba en una veterinaria, aunque tenía varios pasatiempos, pintaba, dibujada o armaba todo tipo de proyectos, pasaba horas leyendo, también tocaba el piano, guitarra, flauta, arpa y violín, hablaba 7 idiomas, japonés, francés, inglés, ruso, chino, español latino y portugués, le alegro tanto saber sobre su gusto por la cocina, pero igualmente diseñaba ropa, sólo por gusto jamás para profesión, lo último pero no menos importante es que cantaba hermosamente.

Un humano admirable sí le preguntaban, pero bueno, se suponía que él sólo debía estudiarlo, no era insensible ni nada pero siempre tomó su distancia con los mortales, precisamente ése era el problema.

¡NO LO ESTABA HACIENDO AHORA!

Se estaba tomando demasiadas molestias por conocer a un humano el cuál se supone sólo iba a "estudiar" para saber el porque de su poder para verlos. 

Estaba tan confundido, lo que comenzó como una simple observación pasó a ser otra cosa, muchas veces lo miraba más tiempo de lo debido, su mirada se mantenía fija en el sin comprender la razón, sólo parecía querer mantenerlo siempre bajo su rango de visión, en ocasiones reía por sus ocurrencias así como la forma tan singular en la que se movía cuando lo atacaban los nervios pero también se preocupaba cuando algo molestaba al menor sintiendo la extraña necesidad de hacer algo y así aminorar su carga, incluso llegó a sonrojarse cuál chiquillo cuando en más de una ocasión se vio atrapado espiando lo por un descuido al verse distraído, al muchacho no parecía molestarle e inesperadamente le sonreía o lo saludaba tan alegré ...

¡¿QUÉ LE ESTABA PASANDO?!

¿Cómo un humano podía hacer eso?, nunca sintió el más mínimo interés en alguno, pero se sentía tan nervioso cuando lo descubría mirándole y ésa sonrisa que le dedicaba sólo lo empeoraba todo, comenzaba a preguntarse sí acaso ¿Estaba enfermando se?, ¿Quizá ya se volvió loco por todas las tonterías de Locura?, tenía que haber una explicación para ello.

- ¡¿Qué me está pasando?! - gritó desesperado como sí esperará que el viento le diera una respuesta -

Ahora mismo se encontraba en el mismo parque dónde solía verlo seguido, estaba tirado en el pasto boca arriba mirando en cielo con frustración por no entender que le ocurría, quizá lo mejor sería regresar a casa por ahora, sí, eso sería lo mejor.

- No creo que alguien te vaya a contestar sí lo preguntas así - escucho desde arriba una voz ya conocida a lo que abrió los ojos de golpe por la sorpresa, topandose con aquellas esmeraldas hipnotizantes -

De inmediato se puso de pie a como pudo casi chocando con él pobre muchacho, aunque este logró esquivarlo a tiempo y tan sólo sonrió divertido ante la actitud del más alto.

- ¿Todo bien? - cuestionó colocándose frente a él para mirarlo teniendo que levantar un poco su rostro -

- ¿Qué haces aquí? - interrogó él más alto sintiendo como su corazón latía fuertemente por alguna extraña razón -

- Bueno quería pintar, el día es muy lindo, aunque ya comienza otoño y hace algo de viento - respondió señalando arriba de ellos las hojas de los árboles que estaban por comenzar a caer siendo golpeadas suavemente por el viento -

Cierto, el invierno no tardaría en llegar, aunque él no lograba sentir ningún tipo de frío pues su piel ya era así por naturaleza.

- ¿Y tú qué haces aquí? - está vez fue el turno del muchacho para interrogar a lo que Muerte no supo que responder -

¿Qué podía decirle?, ¿Soy la muerte y vengo por las almas de los difuntos?, sí claro, seguramente le creería loco, además, ¿Porqué tenía que darle explicaciones?, él era un dios por Mev.

- Últimamente nos encontramos mucho ¿Verdad? - comentó sonriente a lo que él juez se puso tan rojo como foco navideño sin saber que decir cuando era evidente que se refería a todas las veces que lo atrapó viéndolo como todo un acosador aunque él dijera que no lo era -

- B - bueno yo ...

- Es raro ver a alguien como tú - mencionó con vos suave y un ligero sonrojó coloreando sus mejillas - no me mal entiendas, me refiero, eres muy alto y ...

Sí, eso lo sabía, no tenía porque mencionar lo.

- Lo siento, me pongo algo nervioso cuando hablo con personas nuevas.

¿Así que no era él único nervioso?

- Yo, sólo quería darte esto - explicó sacando una hoja de papel del maletín que llevaba consigo - se que es extraño pero quería darte lo, es que, tú, bueno, hace mucho que no lograba pintar nada y cuando te ví, no se, simplemente sentí la necesidad de hacerlo, ahora tengo toda clase de ideas y es gracias a ti - mencionó logrando dejar bastante confundido al juez pero con una agradable sensación borboteando en su pecho - por eso, quería darte lo, como un gracias, no tienes que aceptarlo sino quieres, después de todo soy sólo un extraño - musitó lo suficientemente fuerte para que sólo ellos escucharán -

Muerte se quedó estático por largos minutos sin saber que hacer y con temor de ser visto por los demás, sin embargo, lentamente estiró su mano para tomar aquel trozo de papel más cuando su mano por error tocó la ajena logró sentir una fuerte corriente eléctrica que le descolocó durante varios minutos donde ambos sólo permanecieron viéndose él uno al otro fijamente como sí temieran arruinar el momento con sólo moverse. Muerte no cabía de la sorpresa, parecía que también podía tocar los y no solo verlos, ¿Qué más podía hacer?, ¿Quién era realmente ése chico?, ¿Porqué lo hacía sentir así?.

Con más dudas que respuestas él juez rápidamente tomó la hoja de papel de las manos ajenas y tan pronto como pudo desapareció de la escena dejando al pobre chico sin saber que hacer o decir, ahí parado con una inmensa confusión taladrando su cabeza.