Un vistazo al pasado

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16 años antes:

En la academia de konoha era la hora del almuerzo, tres jóvenes almorzaban en el patio junto a dos arboles que daban una basta sombra para resguardarlos del sol abrasante:

-Oye Obito- dijo una castaña.

-dime Rin...- dijo el mencionado mirando una nube pasar y dando pequeños bocados a un sándwich de queso y cebolla.

-Te encuentras bien hoy estás muy distraído- dijo la joven con preocupación.

El joven de pelo negro solo se limitó a asentir, su otro compañero un joven de cabello plateado lo miraba con intriga:

-Estás seguro, no te ves nada bien pareces estar en la luna y preocupado por algo- dijo de manera risueña mientras comía un trozo de tarta de papa.

-¡SE PUEDE SABER QUE ES TAN GRACIOSO IDIOTA ES ALGO MUY SERIO, ALLÁ TÚ SI QUIERES AHOGARTE EN TUS PROBLEMAS SOLO PERO DEBES SABER QUE ES MEJOR HABLAR CON AQUELLOS QUE SE PREOCUPAN POR TI PARA VARIAR BAKASHI!- dijo enfurecido el moreno.

-Muy bien bonito entonces dinos qué te sucede...- dijo sin expresión en su voz, aunque por dentro se moría de la curiosidad.

La castaña asintió y sonrió mientras bebía un té de bueazno y freza.

-bien...- refunfuñón el moreno -Lo que sucede es que luego de la misión de mañana mi familia se mudará a la tierra del té por un problema con mi abuela materna, nunca alguien del clan uchiha había salido de Konoha... lo bueno es que como chinos puedo hacer misiones para la aldea pero son escasas ya que deben estar relacionadas a la tierra del té solamente- dijo muy desalentado el peli negro mirando al cielo viendo a las nubes pasar, cuando acabó de hablar miro a sus compañeros.
Rin se veía triste, pero Kakashi estaba pálido en shock, con los ojos como platos quien luego los cerró y bajó la cabeza, suspiró:

-así que después de la misión de tres días de mañana... ya no estarás... con nosotros...- intentaba soñar como si no le importara pero en su voz se podía oír tristeza.

El azabache con ojos de asombro por la reacción del peli plata solo asintio.

-Kakashi estás bien?- pregunto Rin con extrañeza.

-Seguro es solo que no me esperaba esto...- decía mientras levantaba la mirada.

Sonó la campana y los tres jóvenes se dirigieron a un campo de entrenamiento para realizar practica y una simulación de la misión de los Sifuentes días.
Cuando le legaron su profesor ya estaba en el lugar recostado en un poste de madera colocado en línea junto a otros dos en medio del campo:

-Buenas tardes muchachos- dijo el rubio sonriendo.

-Hola Minato sensei!- exclamo la castaña, el pelo negro lo dijo en un tono calmado pero el peliplara parecía no haberse dado cuenta de que habían llegado al campo de entrenamiento estaba perdido en sus pensamientos:

-Buenas Kakashi- le habló su sensei, sacándolo de su transe, el peliplata lo miro sin expresión alguna en su mirada...

-Hola Minato sensei- dijo levantando su mano derecha.

El resto de su día transcurrió normal discutieron su formación, al frente iría Minato, a la derecha iría Obito, a la izquierda iría Kakashi y al fondo iría Rin. Luego discutieron cómo se turnarían para hacer guardia, primero sería Kakashi, después de el Obito, luego Minato y por último de ser necesario Rin haría la última guardia. Formularon dos planes en caso de batalla y luego cada uno fue a su casa.

Cuando Obito llegó a su casa luego de cenar se tiró en su cama, pero lain pensaba en la reacción de Kakashi no se lo esperaba para nada; al final el sueño le ganó el sueño y se quedó dormido.

Traerte de vuelta a la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora