Me senti tentada, sus labios estaban tan cerca de los mios que no resisti chocar los mios con los suyos, fue un beso extenso que termino en un suspiro. Alrededor de 5 minutos volvio todo a la normalidad, y reaccione.
- disculpa, yo me tengo que ir -me pare rapidamente casi con el corazon en la mano, e inmediatamente Chris logra detenerme tomandome del brazo
- espera, tu eras la que no queria que me fuera- dijo tomando mi mano
- disculpa, es que ya es tarde -dije nerviosa-
- disculpa si eso te molesto, no fue mi intención asustarte, ni nada de eso - dijo un poco nervioso, mirando hacia otra direccion
- Esta bien, pero sueltame, por favor-
Chris me suelto lentamente, casi confuso, por la situacion
- por favor, solo fue un accidente - Dijo Chris, como si hubiese sido algo malo, aunque no era bueno, pero intentaba poco menos que calmarme o arreglar la situacion
- no crees que fue demaciado pronto para pasar por algo así? te conoci hace dos días-
- si me perdonas, te prestare denuevo a Magdalena - respondio con una sonrisa, como la sonrisa de un niño
- esta bien, de todas formas eso no me habia molestado - reí -
- entonces? - fruncio el entrecejo
- es muy tarde, debo volver a el hotel - le sonrei
- quieres que te vaya a dejar?- contesto luego de un pequeño silencio
- no, no hace falta, no te preocupes- fue mi estupida respuesta, y valla que bastante estupida, pues deseaba que me acompañara, y porque ya era bastante tarde
- no seas tonta, te puede pasar algo, ya! te voy a acompañar, y no te estoy preguntando -rió el-
- me dijiste que me prestaras a Magdalena, debes cumplirlo-
- pero eso era porque..- interrumpi a su excusa-
- no, no importa, solo prestamela - le sonrei casi descaradamente, pero en el buen sentido-
Tuve que aceptar que me acompañara hasta el hotel ya que insistio mucho, pero acambio de eso me presto su guitarra, su amada Magdalena, conversamos bastante, hasta que llegamos a el hotel
- Bueno, aqui es...adios-
- cuidate mucho
- tu tambien
- ahora devuelveme a Magdalena -rie-
- u.u esta bien -laila le entrega a magdalena-
- quedate la chaqueta, para que me recuerdes
- entonces nos vemos mañana? - le pregunte con su unica intención, verle
- no lo creo - respondio un poco aturdido
- por que? -
- no me gusta planear las cosas, todo resulta mal cuando se planea- excusó como si estuviese recordando algo pasado, muy añejo
- entonces adios- intente sonreirle
- adios,- Chris tomo aire y antes que yo le respondiera interrumpio -Laila esque.. - dijo entre suspiros
- Que sucede Chris?
-No, nada, disculpa-
-Estas seguro?-
-Si, lo siento, Adios- dijo mientras me abrazaba, su respiracion rosaba mi mejilla como intentando susurrarme algo, pero en vez de decirlo, lo cubrio con un beso, en la mejilla
Chris iva ya a su casa y yo lo observaba mientras el se iva, Chris volteo intentando decirme algo, pero nuevamente no lo consiguio, volteo y siguio caminando
A la mañana siguiente desperte muy comoda, el hotel era realmente bueno, con todas su comodidades, me di una ducha y sali a explorar esa hermosa ciudad, pero ahora seria de día, y porsupuesto, con la intención de encontrarme con Chris, porque aunque no le conociece, todo parecia hermoso, con él, junto a él.
Para mi suerte, en las calles de esa hermosa ciudad, sin haberlo siquiera pensado, me encontre con una de esas buenas amigas que se tiene cuando se es adolecente, se llamaba Ema. Claro que en el momento no la reconoci
- Disculpa - me toco el hombro
- ¿si? - la mire un poco confusa
- Tu, eres Laila ¿no es así? - dijo con una dulce sonrisa, esa tipica de ella-
- si, -reí- te conosco, tu eres...
- soy Ema, no? - extendio sus brazos intentando ser reconocida
- si! claro que eres Ema, ¿como has estado? - nos abrazamos-
- Bien! tu...¿como es que estas aqui? -
- tenía ganas de salir de la ciudad en la que me encontraba y llegue aqui
- Que gusto de verte! deberías visitarme, en mi casa
- yo por ahora me estoy quedando en un hotel, queda cerca de el mar
- Si quieres puedes venir a quedarte en mi casa, no tengo ningun problema
- Enserio? lo dices enserio?
- Pero porsupuesto! solo que, mi hermano esta viviendo conmigo, eso no sería una molestia para ti, o si?
- No, para nada - le sonreí-
Ambas comenzaron a caminar por el centro de la ciudad mientras conversaban
- y...¿como se llama tu hermano?