☘シ︎ᗩՏI ᗴՏ, ՏOY YO (ᖇOՏᗴ ᐯᗴᖇ.)シ︎☘

🌹One🌹

♤♡♧《 ¡Hola! ¿Qué tal? Mi nombre es Rose DiCaprio, y aunque no lo parezca, mi apellido no lo puse por el actor, realmente mi abuelo era quien llevaba su mismo apellido y por el cariño tan inmenso que le tengo, decidí que sea parte de mi nombre artístico. Ahmm en este preciso momento tengo apenas doce años por lo que aquí en Argentina, país donde nací, me toca cursar séptimo grado, no se si estas cosas sean tan relevantes pero igual quería sacarme las ganas de contarles así que las dejaré.
Ahora mismo me encuentro en el baño de mi escuela, lavandome el rostro que estaba cubierto de algunas gotas de sudor por culpa del infernal calor que hacía en el aula, las clases ya son lo suficientemente aburridas como para tener que sumarle el hecho de que las malditas estufas siempre se les da por funcionar en la estación equivocada, en el crudo invierno padecía fuertemente el sufrimiento del terrible frío y ahora por fin florecida la primavera me tocaba sobrevivir al sofocante ambiente, una completa mierda en pocas palabras.
Me encontraba demasiado tranquila disfrutando de una paz inmensa que no suelo sentir nunca en esta horrible escuela, repleta de imbeciles que me hacen perder un poco más la fe en la humanidad a cada minuto que pasa. El ambiente estaba muy silencioso a tal punto que me llegaba hasta asustar, no se escuchaba ni un mínimo susurro aquí adentro, cosa que a mí se me hizo extremadamente relajante despues de una hora teniendo que lidiar con aquellos sonidos irritantes que salían de bocas de mis compañeros. Pero igualmente pese a la bella paz que buscaba invadir mi ser, no podía ignorar a esa punzada en él pecho que me generaba un miedo en lo más profundo de mi que me advertía que salga de ahí lo más pronto posible, claro esta que no le hice caso ya que no suelo confiar mucho en mi instinto por la cantidad de malas pasadas que me ha hecho pasar.
Cerre los ojos y respire profundo, permitiéndole a mi cuerpo poder sentir y disfrutar de la suave tranquilidad que habitaba en el ambiente, incluso si el lugar en el que estaba no poseía el aroma más lindo del mundo no me interese por eso, ya que me gusta presumir que me conformo con poco y esos pocos minutos de soledad ya eran un alivio para mi alma.
Mis oídos pudieron distinguir el sonido de unos ligeros pasos que parecían acercarse hacía aquí, comencé a temblar mientras se hacían más fuertes y recé porque si realmente era aquello que intuía sucediera rápido, podrán decirme que irme habría sido la mejor opción y la más obvia pero lamentablemente mi agilidad mental nunca fue muy alta, por lo que ahora con el miedo que empezaba a sentir mucho menos, simplemente me bloquee ante las pocas posibilidades que veía de ganar aquella situación que yo misma había generado, quiero decir, que con mi estupidez yo misma me había acorralado.
Aquella paz y esa tranquilidad de la que tanto me gustaba hablar fue interrumpida cuando un fuerte empujón me hizo chocar contra la pared, acaricie mi hombro derecho realizando muecas de incomodidad por el impacto, realmente eso me había dolido un poco, di vuelta la cabeza con lentitud cual película de terror para ver al responsable, y sin tener tiempo de reaccionar me estampan una mano abierta en la mejilla izquierda, sí tal y como lo sospechaba, eran ellas.. otra vez.. todos los días me pregunto ¿se cansarán alguna vez de hacerme sufrir? Se me hacía ridículo preguntarles ya que podía responderme aquello yo sola con tan solo ver sus actos diarios, claro que no se cansan y tampoco lo harán nunca así que tenía que dejar de soñar.
Ellas empiezan a decirme sus acostumbradas barbaridades, expresando aquellas palabras tan exageradamente agresivas hacía una persona con un estilo un poco más desprolijo, que lo único que hace es permanecer en un rincón ante la imposibilidad de socializar normalmente por culpa de la vergüenza.
Hoy me habían entrado ganas de arruinarles un poco la vida, así que por primera vez después de meses, me exprese:

Rose: No me importan ustedes ni sus horribles caras, si lo que buscan es verme muerta van a tener que matarme ustedes, pero mientras yp viva estaré aquí presente todos los malditos días para joderles el día.-Dije con una sonrisa falsa y algo sadica, disfrutando del poder burlarme de ellas.-