En Busca De Una Nueva Vida

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Luego de testificar en la comisaría y de que nos tomarán los datos, mi hermano me llevó a su hogar, es un hermoso apartamento con vista al Central Park, ambos entramos a la recepción casi abrazados. Aunque lo sientan extraño, él es mi hermanito y tenía dos años sin verle, el es lo único que he tenido toda mi vida.

Llegamos a la tercera planta del edificio, Erick quita su mano de mi hombro y abre la puerta con una tarjeta... Lo miro un poco extrañada, ya que es un edificio algo lujoso y según me venía contando en el camino, trabaja como co-administrador de una empresa, esto es mucho para ese empleo..

-Esto es hermoso, ¿tú solo lo decorate? -Pregunto, mirando cada detalle del apartamento, tiene hermosos muebles y detalles en lo que parece porcelana.

-No. -Ríe bajito, había olvidado que Erick tiene hoyuelos -Una amiga es diseñadora y me ayudó a decorarlo, bueno, no me ayudó... Ella lo hizo todo. -Soltamos una carcajada.

-No te imaginas todo lo que te extrañé, Erick. -Vuelve a abrazarme y toca mi cabello.

-Está más corto que la última vez que te ví, ¿Por qué lo cortaste? -No puedo ver su cara, pero apuesto a que tiene el ceño fruncido.

-Es una larga historia que en realidad no es tan larga. -Alzo el rostro y lo miro riendo -Sabes que una de las cosas que más cuidaba de mi era mi pelo, verdad? -El asiente. -Pues según Anabelle y Mark desobedecí a su orden de no mirarles mientras hablan y "accidentalmente" se calló una vela al lado de donde estaba sentada -Río recordando la escena mientras Erick me mira atento -Me dieron tantos escobazos para que el fuego se apagase que terminé dos días en cama.

Erick no reía ante lo que le acababa de contar, más bien estaba enojado..

-Yo debí de haberte ido a buscar hace mucho y no dejarte sufriendo con esos psicópatas. -Siento que su abrazo se hace más fuerte y yo quito sus brazos para mirarle de frente.

-Hermano, ya estoy aquí, estoy bien, cansada y con el cabello corto, pero bien y contigo, al fin! -Sorío y volteo para seguir caminando por el apartamento -Espero que tengas una habitación para mí, necesito una sienta de dos semanas.. -Sonríe y se aparta un poco de mi.

-No tenía nada preparado, pues tu llegada me ha tomado un poco desprevenido, puedes quedarte en la habitación de invitados en lo que decoramos la tuya. -Sonrío feliz, mi hermano es el mejor del mundo, nuevamente lo abrazo y nos sentamos en el sofá a descansar y hablar de todo lo sucedido estos 2 años.

...

Mi primera noche aquí fue genial, Erick me mostró que era una pizza por primera vez y yo quedé fascinada, no me imaginé que un trozo de pan con salsa de tomate y queso fuese tan delicioso. El me contó sobre como llegó aquí y lo difícil que fue para el, nadie quería ayudarle, esos 4 días de camino que tuvo los hizo sin comer y llegó por que se desmayó en una autopista y lo llevaron al hospital.

Al levantarme de la cama coloco en mis pies unas pantuflas que mi hermano me prestó y camino hacia el baño. Al mirarme al espejo puedo ver mi pelo todo enredado y estropajoso, suspiro y me lavo los dientes. Cuando bajo las escales llamo a Erick, pero al parecer ha salido. Mirando un poco más por la cocina me encuentro unas tostadas con huevos revueltos en un plato con una nota encima: ''Tuve que salir temprano a resolver unas cosas, te dejé desayuno y ropa en unas bolsas en la sala de estar, ponte bonita que hoy saldremos para que conozcas Nueva York''. Al terminar de leer la nota me emociono, salgo corriendo a la sala de estar y me encuentro con más o menos 7 bolsas de diferentes tiendas, Erick compró muchas cosas bonitas, aunque muy sexys para mi gusto.

Antes de todo, desayuno y tomo las bolsas y voy directamente a mi habitación.

Sin dudarlo saco todas las prendas de la bolsa y traté de armar conjuntos para ver cual sería el mejor para el día de hoy, imaginé que tendríamos que caminar algo y aunque piensen que estoy cansada por los días que vine caminando, sé que estoy a salvo y cada parte de mi tiene mucha intriga en conocer todo lo que me había perdido y estaba tan cerca de mi..

Erick ha sido siempre un tanto sobreprotector conmigo y me extraña mucho que haya elegido estás prendas para mí, hay shorts, blusas cortas, un par de tacones, vestidos cortos y demás cosas que no estoy acostumbrada a llevar..

Elijo el único pantalón largo que hay, es de esos jeans con rasgados en las rodillas y una camiseta blanca bastante sencilla y unos tenis bajitos de color negro...

Trato de peinar mi cabello con un cepillo que había en las bolsas y hago una trenza, Erick se sorprendió al ver mi pelo así y es por el simple hecho de que antes lo llevaba por la cadera y el corte no era algo que negociar, luego del percance de la vela tuve que cortarlo a la altura de mi busto y es mucha la diferencia...

Al terminar de atar la trenza escucho unos leves golpes en la puerta y salgo disparada a abrir, me encuentro a un Erick muy sonriente y con un ramo de mis flores favoritas en su mano, unas hermosas peonías de color blanco.

-10 por cada cumpleaños que falté. -Ya he perdido la cuenta de cuantas veces me ha pedido perdón por no ir antes a buscarme, sé que no fue su culpa, quería antes tener todo organizado antes de ir a por mí.

-No hacía falta hermano, pero están hermosísimas! -Tomo las flores de sus manos y le pregunto dónde hay un jarrón, ambos la colocamos en la encimera de la cocina.

-Ok, ya están las flores en el jarrón y mi hermana ya está toda guapa, quieres ir a conocer Nueva York, hermanita?

-Sin duda alguna.

....

Creo que jamás en mi vida había estado tan atascada de comida, probé todos los chuches que me entraron, todos los bagels que me permitió mi estómago y cada banderilla del Central Park. Estoy a punto de reventar y Erick solo se ríe de la situación.

-Oye Dani, dime una cosa.. -Levanté las manos para que siguiera -Te graduaste de la secundaria, no? -Tengo los ojos cerrados, pero les apuesto a que tiene una ceja levantada, vuelvo y levanto las dos manos, pero está vez en compañía de los pulgares.

-Terminé en junio, pero no he podido iniciar la universidad, sabes lo que "nuestro padre" pensaba sobre eso. -Le miré y solo se limitó a contestar asintiendo con la cabeza. -Por cierto, quiero otro apellido, Erick. Palmer me causa arcadas. -Escucho una risotada de su parte y se sienta a mi lado en el banco.

-Conoce a tu hermano Erick Moore, Danielle Moore..

Para ustedes será solo un apellido, pero para mí significa mucho, ese era el apellido de nuestros padres biológicos, era una de las pocas cosas que se podían percibir en el papel viejo y arrugado que encontró Erick.
Sonreí y le dí un gran abrazo a mi hermano.

-Nos queda bien, me gusta. -Erick sonríe con satisfacción y se levanta del banco.

-Anda tira Dani, quiero que conozcas a unas personas. -Tira de mis brazos hasta que logra levantarme y nos vamos caminando hasta el apartamento.

....

Veníamos todo el camino riendo y empujándonos como dos niños pequeños, haciendo historias y sobre todo apreciando el hermoso momento que estábamos pasando, hasta que llegamos a la puerta del apartamento y vemos a dos chicos y una chica, el más bajo de los dos estaba abrazando a la chica mientras que el otro chico estaba de espaldas a nosotros.

-Hey chicos! -Les llama Erick y estos voltean. El chico y la chica que estaban abrazados le saludan muy cariñosamente, mientras que el otro se queda un poco más atrás y se limita a darle la mano mientras me mira de pies a cabeza.

-Con que eres Dani, eres muy mona. -Me abraza sin nada de vergüenza el chico más bajo y la chica me mira muy sonriente.

-Es que este río es un pesado contigo, desde el primer día que lo conocimos era solo hablando de ti y de que tenía que volver y que no sé que. -Agrega ella y me regala otro abrazo.

-Es un gusto conocerles. -Respondo algo tímida.

-Chase, venga a saludar tío.-Le dice el más bajito al alto, quien voltea los ojos y sonríe de una manera hipócrita.

-Hola niñata, soy Chase Finnian. -Toma mi mano y la besa -Es todo un gusto para mí conocerla. -Junto mis cejas.

-Danielle Moore, pero pueden decirme Dani. -Quito mi mano y sonrió con una pequeña mueca.

-No te extrañes, Dani, Chase es así de raro siempre. -Susurra Erick en mi oído pasando por mi lado para abrir la puerta. -Vamos a dentro. -Dice ahora para todos.