Fighting, with love! ; YoonNamTae {O.S} (Fluff)

~Lo hiciste bien, amor~

"Yoongi confiamos en ti.",
"¡Tu puedes, Yoongi!",
"Este partido significa mucho para nosotros, no nos decepciones.",
"Haz tu mejor esfuerzo.",
"Te deseo suerte". Muchos y más pensamientos aparecían en su mente sin detención. Trata de calmar su respiración agitada y enfocarse en la dirección de la bola, estaba en un partido en este momento, no podía simplemente darse el lujo de estar desconcentrado o tener la cabeza en las nubes, si quería demostrarle al mundo su pasión hacia el deporte, sus inmensas ganas de ser un jugador profesional de fútbol, debía dar todo de sí, su máximo potencial para así sentirse orgulloso de sí mismo.

⎯ ¡Yoongi, pasa la pelota!⎯ Grita uno de sus compañeros de equipo a unos pocos metros de distancia. 

Yoongi asiente de acuerdo y se prepara para hacer el pase, pero antes de lograrlo cae preso en una trampa.

Cuatro de los jugadores del equipo contrario, sus rivales, lo aprisionan mientras corre con el balón entre sus piernas. Yoongi comenzaba a ponerse nervioso, aunque se deshizo de ello por la llegada de la promesa que les hizo a sus novios, les prometió que no dejaría de creer en sí mismo, enfrentaría todos los obstáculos con valentía, y Yoongi no deseaba decepcionarlos por nada en el mundo.

Toma una profunda respiración para no perder el control en su persona interior y con confianza corre directo hacia la portería. Era ahora o nunca, alcanzaría su futuro con sus propias manos, y nadie lo detendría.

⎯¡Yoongi! ¡¿Qué estás haciendo?!

⎯¡Yoongi, no!

⎯ ¡¡Pasa la pelota, Min, pásala!!

⎯¡Retrocede! ¡Es otra trampa!

Yoongi escuchaba todos los fuertes y angustiosos gritos de sus compañeros, los cuales estaban desesperados porque sentían que perderían; sin embargo, nuestro protagonista no quería creer en ello, así que se aventuró a las probabilidades, a las 0000.1 porciento de probabilidades de conseguir una victoria.

Sabía que era riesgoso ir directo a la portería enemiga para anotar un gol él solo, acompañado de todos los rivales encima suyo y el cansancio que sufría su cuerpo luego de horas en el intenso y caloroso sol del mediodía, pero quería hacerlo, deseaba hacer sentir a todos orgullosos de un logro que consiguió él mismo, solo él, sin la ayuda y el consentimiento de nadie más.

Yoongi toma fuerzas y el suficiente coraje para patear la pelota con fuerza e intentar que llegara a la portería y anotar un gol pero...todo, todos sus esfuerzos se vieron abajo en el instante en que el portero tomó el balón entre sus manos, deteniendo aquella posible jugada ganadora y victoriosa, y el ruido del tiempo acabarse en el partido retumbó en los oídos de todos los presentes. El equipo rival fueron los ganadores, por un punto, pero ganaron, y ellos habían perdido por completo. Yoongi no podía creer la realidad frente a sus ojos, esa fue su última oportunidad, su último intento de demostrarle a su familia cuánto deseaba ser un profesional, sí su equipo no ganaba este partido no pasarían a las finales, lo sabía bien, y todo fue su culpa...si tan solo hubiera escuchado y hubiera pasado el balón cuando sus compañeros se lo pidieron, lo más probable fuese que hubieran ganado, pero ya no habían esperanzas, ya Yoongi estaba dispuesto a rendirse en sus sueños, todos sus esfuerzos, ¿para que? Para simplemente apresurarse y perder al final.

⎯ Oye, Yoongi, no te sientas mal, lo lograremos a la próxima.

⎯ Mira el lado bueno, jugamos muy bien este partido, eso es lo importante.

⎯ ¡Anímate!

Algunos de sus compañeros de equipo se le acercaba y le daban palmadas en su espalda u hombro y le decían palabras de ánimo para que no se echara toda la culpa y se sintiera mal consigo mismo por la derrota.