Sin decir nada salió de allí corriendo. No tenía ganas de cantar nunca más, se sintió sin talento, sintió que le falló a todas esas personas al salir cobardemente de allí. Sentía que todas esas personas podían verla a través de su ropa. Se dió tanto asco.
Comenzó a hiperventilar, llorando y sintiendo taquicardia. Si, le estaba dando un ataque de ansiedad, jamás se imaginó que terminaría así, como todos sus héroes, muerta sola. Sé miró al espejo y supo que estaba rota, tenía la máscara de pestañas deshecha, su sonrisa ya no estaba más y su felicidad se había esfumado. Pronto un golpe en la puerta se escuchó y supo que era Jonny —su mánager—, ahora sí. Estaba muerta.
—¿Qué crees que es lo que estás haciendo? —gritó molesto.
Lottie lo miró y supo lo que había hecho, pero ya no había vuelta atrás. Las personas en el fondo se escuchaban miles de gritos con comentarios negativos hacia ella.
Era demasiada presión para una chica de 22 años.
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Había una vez una chica conocida por todos y por nadie
RomanceY cuando nadie la vió entre tantos flashes, drama y traiciones. Él la encontró. Un poco destruida, pero aún viva y con las mejores ganas de amar a alguien...