Narradora
Tú eras una chica normal de 10 años de edad, tenías una hermanita pequeña de 6 años llamada Lucy. Después te inscribiste al colegio de South Park donde hiciste algunos amigos los cuales eran Kyle, Stan, Kenny y Cartman (O añade a los que quieras), pero días después tu vida dio un giro repentino...
Tus padres comenzaron a pelear cuando tú padre empezó a ser alcohólico, tu madre empezaba a estar harta de recogerlo cada día y eso hacia empezasen varias riñas. Tu y tu hermana pequeña sabíais de esto pero ellos os lo ocultaban todo con una falsa sonrisa fingíendo armonia, Lucy no lo entendía con claridad la razón de las peleas pero nunca le quisiste explicar. Después tu alegre personalidad cambio a una bastante depresiva, Obvio que la pandilla de Cartman noto eso, a Cartman parecía no importarle, Kyle y Stan te consolaban con abrazos eso te causaba una pequeña sonrisa. Pero Kenny era el más sobreprotector de todos
Cuando te inscribiste a la escuela Kenny fue el primero en hablarte y enseñarte toda la escuela, con el paso del tiempo os veías muy a menudo descubriendo su perturbadora inmortalidad, pero ambos erais iguales de pervertidos lo que causó una sonrisa y una atracción de Kenny hacia ti. Erais mejores amigos y Kenny deseaba más que ser eso, Lucy y Karen quedaban bastante seguido para jugar las 2 juntas, Tu hermana siempre traía sus muñecas y de vez en cuando Lucy le regalaba una de sus muñecas a Karen para que ella tuviera algo con que jugar
Pero tu vida empezó a empeorar, tus padres comenzaron a golpearte para expresar su odio e irá hacia todo causandote moratones y rasguños que ocultabas bajo tu ropa para no preocupar a tus amigos (excluyendo a Cartman) de escuela y a tu hermana Lucy, por la noche tu padre comenzaba a gritarle a tu madre a todo pulmón empezando una buena discusión entre ambos, algo que te hacia padecer de insomnio y levantarte con ojeras rojas. Cuando los niños de otros cursos notaron tu repentino cambio de ser aprovecharon tu débil estado para golpearte y causarte más heridas y moratones
Llegaste a casa después de la escuela con sangrado en la nariz, al cruzar por la puerta tu madre te dio la cachetada diaria que recibías, te fuiste a tu habitación y comenzaste a estudiar, era lo mínimo que podias hacer para olvidar a tus padres. La noche cayó y fuiste a recoger a tu hermana del salon, estaba dormida en el sofa y la cargaste hacia su cama y la arropaste para finalmente darle un pequeño beso en la frente. En eso vas a mirar a tus padres y te das cuenta que no están "Supongo que se fueron por separado a lugares distintos... Es lo mejor que puedo pensar..." Te decías a ti misma
En eso te vas a tu cuarto, no tenías expresión ahora mismo, solo un ligero vacío en tu interior, habías perdido la esperanza de que la vida te sonriera por una vez, Lucy jamás entendió el porqué tú feliz y amable personalidad cambio a una depresiva y negativa. Sacaste un cuchillo que tenías debajo la cama por si tú padre venía borracho para atacarte, pero no lo ibas a usar para eso, "Puedo ver claramente que la vida me odia, ¿Entonces para que vivir?" Te decías en tu mente mientras sujetabas el cuchillo apuntando hacia tu frente pero algo inesperado sucedió
Cuando ibas a clavarte el cuchillo alguien sale de tu ventana (La cual estaba abierta) empujándote y evitando que te suicidases quedando encima tuyo, te retorcias para cumplir el destino que querías ahora mismo, pero aquella sombra te impedía moverte
Mysterion: ¡¡PUTA ZORRA TARADA!! ¿¡PERO QUE PRETENDES?! *sujetándote*
___: ¡¡AGH¡! ¡¡MATARME!! ¡¡NO PIENSO SOPORTAR MAS QUE LA VIDA ME SIGA ESCUPIENDO EN LA CARA!! *Tratando de safarte mientras llorabas*
(Hmm, ¿De dónde vienen esos diálogos tan familiares? 🤔🤔)
Narradora
Aquella sombra te alzó de los hombros apoyando y acorralandote en la pared, no sabías quien era aquella persona misteriosa, pero cuando la viste mejor divisaste a un superhéroe de color morado según sus rasgos parecía un niño de tu edad. El súperhéroe te retiro el cuchillo que tenías en manos y lo tiro a una parte de tu habitación. Fue en ese momento, ¿Cómo supo aparecer en momento exacto? ¿Cómo sabía dónde vivías? Muchas preguntas rondaron en tu cabeza pero lo único que ahora mismo deseabas era estar muerta
