Capítulo diecisiete.

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  Al otro día, Shōto se encontraba vistiendose para ir a la escuela. Katsuki le convenció de ir, pues de lo contrario, iba a atrasarse. El chico rubio hacía en otro futón del bicolor, ya que luego de esa "reconciliación", éste se había quedado a dormir.

  Aunque el chico de rojos rubíes dijo que olvidara que estaba enamorado de él, no podía. Seguía rondando en su cabeza tal pensamiento, a tal punto de hartarse por estar destruyendo lentamente las emociones del chico.
  Sentía cosquilleos en su estómago, pero qué iba a saber él que era una señal.

  Bakugō sabía claramente lo que quería, pero él no. Ni siquiera sabía si estaba preparado para tener una pareja, ¿qué se supone que tendría que hacer? No tenía idea. ¿Y si la cagaba, y rompía con aquella persona?
  Pero, pensándolo mejor, él ha la había cagado con Katsuki. Y ni siquiera eran una pareja.

  Había cambiado, cambió en verdad. Reía mucho, sonreía y era feliz. Pero de repente su mundo se vino abajo.

  Volvió a tener esa cara seria, sin expresión alguna. Esos ojos parecían grises, la felicidad no se veía en ellos.

  ¿En verdad no podía tener una relación de lo que sea con alguien, y que no haga algo que lo arruine? Porque siempre era lo mismo.

  Tener a alguien a quien ame, demasiado.
  Pasarla bien con la persona.
  Arruinar todo.
  No volver a ver a esa persona querida.

  Ya no lloraba, estaba seco. Le dolía el corazón, odiaba eso.

  Sentia la misma situación que cuando su madre lo abandonó. Lo hizo sufrir, aunque sabía que no era su culpa.

  ¿No se supone que el amor sea felicidad, arcoiris, y lindo? Porque él lo estaba pasando horrible.

  Mientras pensaba, el celular sonó. Fue tranquilamente hasta éste, y lo recogió del suelo.

  Era el hospital psiquiátrico en el que su mamá se encontraba. Y los peores pensamientos vinieron como flash a su mente. Pero nunca imaginó que fuera tan malo.

— ¿Usted es Todoroki Enji?- Una voz de un hombre habló.

— Soy Todoroki Shōto, su... hijo. ¿Hay algún problema?

— Así que es un familiar... ¿Podría pasarnos con algún mayor de edad?

— Lamento decirle que no hay nadie en mi casa ahora, ¿qué pasó? Dígame ya.- Se estaba desesperando. Ese hombre no le decía que mierda pasaba, y él ya tenía demasiadas cosas en su cabeza.

— Lamentamos decirle que... La señora Todoroki está en un estado... muy grave.- Dijo, intentando sonar sensible. Pero sólo sonaba hipócrita para los oídos de Shōto.

  El bicolor dejó de respirar por unos momentos. ¿De verdad escucho eso? ¿Acaso era una puta broma? Porque si lo era, era una de mal gusto, una de muy mal gusto.

— ¿Q-Qué mierda acabas de decir...?

— Verá, su depresión ha aumento en demasía, por lo cual ha empezado a autolesionarse.

— ¡¿PERO CÓMO MIERDA PASÓ?!- Lágrimas recorrían por sus mejillas. Su corazón dolía y se tía que iba a desmayarse. Gritó, gritó con todo el dolor desde el fondo de su corazón.— ¡SU PUTO TRABAJO ES CUIDAR A LOS PACIENTES!- Su voz se quebraba poco a poco, no podía creerlo.

— Lo lamento, pero aquí no cuidamos a gente con problemas mentales. Para eso tienen un manicomio.

— ¿LE ESTÁS DICIENDO ENFERMA A MI MAMÁ?

— No, niño. Calma.

— NO ME VOY A CALMAR, ACABAS DE DECIRLE ENFERMA MENTAL A MI MADRE, Y USTEDES NO HACEN NADA POR AYUDARLA. ¿SABE USTED POR QUÉ NL VOY A VISITARLA? PORQUE PAREZCO PRISIONERO EN ÉSTA PUTA CASA DE MIERDA.- Dio una gran bocanada de aire y dijo.— ¿Sabe qué? Adiós, no quiero hablar más con usted.- Colgó, y se tiró al suelo de rodillas.

  Culpandose, llorando, lamentándose. Todo.
Ni siquiera unas últimas palabras. No importaba si no veía a su madre desde hace años, era su madre. Y la amaba, demasiado...

— Maldita sea...- Su voz se quebraba, dolía. Ni siquiera fue a clases, rompió su promesa. Pero no le importó, la pasó la noche y tarde llorando, todo el día. Y cuando Fuyumi y Natsuo llegaron, les dio la noticia, pero estos al parecer ya sabían. Sabían que su madre iba a hacer eso. Pero a él no le dijeron nada. Porque él al parecer no tenía tanta importancia como para decirle. Su opinión y acciones no valían nada.

¿todoroki... enamorado?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora