Despues del nuevo amanecer - Intro

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Consciente de que cualquier decisión, podría ser la equivocada, Ana miro con detenimiento a Gerardo y a Pablo y decidió que lo mejor que podía hacer era esperar. Había esperado mucho, demasiado quizás, para todo aquello que iba a acontecer y no estaba dispuesta a dejarse llevar por un sentimiento espontaneo y quizás echar a perder todo. Quería contar lo que tenía en su corazón pero decidió, como tantas otras veces guardar silencion y guardar Gerardo y Pablo estaban frente a ella y la miraban con una mezcla de picardía y asombro, combinado con una gran dosis de respeto. Sin embargo, Ana sabía muy bien lo que ambos tenían en mente y sabía cuan diferentes era sus intenciones.

- ¿Qué paso en la reunión? – preguntó Gerardo mientras comía el maní de un pequeño plato que habían dejado sobre la mesa y esperaba la cerveza que había pedido.

Ana, Gerardo y Pablo se habían encontrado en un bar en el centro de Stuttgart. Desde hacía un buen tiempo en que no habían coincidido y aunque antes solían verse muy a menudo y había hecho muchos viajes de trabajo juntos, tanto a Alemania Espana o Perú, entre otros países, desde hacía un tiempo habían dejado de verse. Pero ahora, aprovechando que Pablo había ido a Stuttgart habían decidio reunirse. El sitio escogido era un sitio tranquilo, donde se podía tomar un cóctel o una cerveza, sentado sobre unos cómodos sofás y desde donde se tenía como panorama de fondo, el centro de la ciudad de Stuttgart, una ciudad que sin ser la suya, los había adoptado a los tres por igual. A Pablo le gustaba la ciudad aunque sabía muy bien, que pesar de aquella vez de crisis en donde pensó en venir a vivir aquí, nunca dejaría su Madrid querido. A Ana y Pablo los unía otra historia a la ciudad.

- Fue muy interesante – respondió Ana.

¿Conseguiste lo que querías? – preguntó Pablo.

- Yo siempre consigo lo que quiero – respondió Ana, dándole un gran sorbo a su bebida. Asustándose al darse cuenta que cada vez necesitaba más alcohol para sentir el efecto que deseaba. Se estaba sintiendo nerviosa y sabía que solo una bocanada grande de aquel trago podía tranquilizarla "Debe dejarlo, para la mano un poco". La voz que sabía que estaba presente no la dejaba en paz y sabía que tenía razón.

Ana, Gerardo y Pablo habían empezado a trabajar en una multinacional casi al mismo tiempo. Ana y Gerardo fueron los primeros que entablaron una amistad. Cuando conocieron a Pablo, se dieron cuenta de que habían encontrado a la tercera pieza del equipo. Ana consideraba que los contactos eran importantes si quería hacer carrera. Y ella estaba dispuesta a hacer carrera. Y su éxito, rapido, aplastante, increible le estaba dando la razón. Pablo era de su misma opinión y se esforzaba cuanto podía en agradar a los jefes y hacerse de un nombre, pero sabía que no podía igualar a Ana en ese aspecto. Estaba teniendo éxito mediano y sabía que podía dar más, aunque también quería disfrutar de la vida. Pero su disfrute de la vida, le estaba costando mucho dinero. Gerardo, si bien quería triunfar, apreciaba el equilibrio de una pausa en su vida y le gustaba pensar sobre lo que podía o no podía estar perdiendo. Gerardo tenía la mala costumbre de pensar más en el futuro que en el presente. Y eso lo había llevado salvarse de muchas cosas malas pero de perder muchas cosas buenas. "Te engañas" solía decirle Ana "pero por algo somos amigos".

- Entre a la reunión – continuó Ana – y me estuvieron esperando. Eran los tres máximos. Fue algo intimidante.

- ¿Intimidante para ti? – preguntó Pablo – No lo creo

- ¿Hablaron del proyecto "Amanecer"? – preguntó Gerardo muy a su estilo de manera directa y sin rodeos.

Tanto Ana, como Pablo y Gerardo sabían muy bien, dado las informaciones que tenía y sus puestos estrategicos en la empresa, el camino un tanto poco tradicional que estaba tomando la empresa y conocían muy de cerca lo que se estaba planeando. Sus puestos le permitían acceder a mucha información importante, pero muy a su pesar ningún de ellos tenía aún el poder de saber que hacer con esa información y lo que les parecía aun peor, ninguno de ellos tenían el poder de tomar una decisión. "Aun no" solía decir Ana "pero muy pronto" y recordaba en un solo segundo, como una pelicula a velocidad rapida de su vida, todo lo que le había pasado hasta ahora, hasta verla llegar al lugar que ahora estaba. Sabía del proyecto "Amanecer", pero sabía algo más pero no era el momento de contarlo a Gerardo y Pablo "No lo entendería" se decía a ella misma "Aún no".

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⏰ Last updated: Oct 28, 2019 ⏰

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Despues del nuevo amanecer (Novela, Intro)Where stories live. Discover now