¡Decidido, Hay Que Compartir! (vharem)

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//Pov Tae//

Todo comenzó desde hace 1 semana. Los chicos y yo nos encontrábamos en uno de los conciertos de nuestra gira. Todo estaba bien... Pero no por tanto tiempo. A lo lejos se veían los carteles que algunas ARMYs llevaban, los comencé a leer, uno decía "Las Nalgas de Jimin" Ese cartel nunca falta, y bueno... Si yo estuviera en su lugar, también haría lo mismo, después de todo, nadie se resistiría a esas nalgas, seguí leyendo hasta que llegue al último cartel de la primera fila, ese cartel era dirigido a mí, el cartel decía "V estas demasiado gordo, deja de comer tanto, tu presencia me desagrada, realmente eres un alien, y yo me pregunto... ¿Por que no regresas a tu planeta y dejas de estorbar en este grupo?" Apenas termine de leer, sentí mis ojos picar, aguante no llorar y seguí mirando a todas las ARMYs presentes, percatándome de que ese cartel con palabras de odio y desprecio dirigidas a mi, no era el único. Terminamos el concierto, fuimos a casa y nos pusimos a hablar sobre cómo nos sentíamos, yo aún seguía con esas ganas de llorar, pero por suerte nadie lo notó. Apenas terminamos de hablar, fui a mi cuarto el cual compartía con Jimin lo más rápido posible, entre al baño y deje que las lágrimas cayeran libremente. Sentía un dolor realmente horrible en mi pecho, por mi mente pasaban una y otra vez las palabras tan hirientes de los carteles. Me mire al espejo con asco, en ese momento pensé ¿como puedo desahogarme sin que nadie se de cuenta de mi sufrimiento? "Estas gordo" Esa palabra no me dejaba tranquilo... Rápidamente saque mi camisa y los pantalones, me mire, "que asco" Fue lo que pensé. Busque por todos lados algo filoso y luego recordé la pequeña navaja que había en un cajón, se preguntarán ¿por que hay una navaja en el baño? Pues, Jimin la puso allí según el, por las dudas entrara alguien e intentara secuestrarme... ¿Quien secuestraría a alguien tan horrible como yo? Rápidamente saqué la navaja, me mire al espejo y puse la navaja sobre mis piernas, si había algo que yo odiara demasiado de mi, eran mis piernas, hice el primer corte sintiendo un ardor algo insoportable, pero sin duda se sentía bien, hice otro más, seguido de otro y otro y otro más. Tan concentrado estaba, que no noté cuando tocaron la puerta de el baño.

—TaeTae~ ¿estas bien?— escuche la voz de Jimin, se notaba preocupado.

—si Jiminnie~ estoy bien— me mire al espejo y ví mis piernas manchadas de sangre igual mis manos —bastante bien—

—¿seguro? ¿Puedo pasar?—

—eeemmm... Jiminnie... Estoy por ducharme... No creo que sea adecuado entrar en este momento...— No quiero que me veas así... Lo siento.

—Esta bien Taehyungie...— escuche como se retiraba, lave y guarde la navaja donde estaba, abri el grifo y deje que el agua cayera sobre mi cuerpo y limpiara  toda la sangre, una vez termine, tome una toalla, me seque y luego me percaté que no había llevado ropa, vende mis piernas y fui con la toalla cubriendo mi cuerpo hacia la habitación. Abrí la puerta y ahí están Jimin con su celular y al percatarse de mi presencia en la habitación, me miro de pies a cabeza y sonrió de una manera extraña. Se levanto de la cama y se acercó a mí. Puso sus manos en mi cintura.

—J-Jiminnie... ¿Que haces?— pregunte mirándolo.

—Tae... ¿Por que saliste así de el baño?— susurro muy cerca de mi oído, causando un escalofrío por todo mi cuerpo.

—olvide llevar ropa... Solo eso...— intente separarme de el para ir hacia mi gran clóset, pero Jimin seguía sin quitar sus manos de mi cintura.  de repente sentí como me depositaba un beso en mi cuello, esa acción hizo que mi corazón comenzará a latir rápidamente. Me separe de el y fui a mi clóset, busque ropa cómoda y me adentre al baño de nuevo, me cambie y salí. Jimin estaba sentado en la cama mirándome de una manera extraña, mientras yo estaba sonrojado.

—¿Te parece si dormimos juntos hoy TaeTae?— lo mire algo sorprendido y solo asenti, no me desagradaba para nada dormir con mi hyung. 

—E-Esta bien Jimin hyung...— respondí algo nervioso, Jimin casi nunca quería dormir junto a alguien, por lo tanto no debía desaprovechar esta oportunidad. Jimin se movió un poco en su cama dejando un espacio supongo para que yo me acostara junto a el.