3| Se que puedes |3

146 20 1
                                    

Narradora

Ya habían pasado algunos días desde que Dulce se había quedado en el estudio juntos a chicos, cada días se sentía mejor que antes.

Pero aún así en sus sueño lloraba por ese ser que no la dejaba en paz, su madre.

A pesar de haberle dicho esas cosas y que estaba enojada con ella, no podía olvidarla pues eras más que claro, es madre, el humano que le dio la vida misma.

En sus días de estadía a logrado al menos fiero de las tontas peleas de los chicos más aún de Bendy y Boris, pero siempre hay bajones de tristeza.

Ella no puede hacer nada más que esperar a que sus días de alegría terminen que en realidad no quedan muchos.

- Hey! Dulce por que no vienes y tomas un poco de aire fresco.- sujerio Bendy

Dulce se prolongó caminar con calma y tranquilidad, se sentía libre de ya no sentir ese mismo ambiente de soledad y tristeza.

- Hola...- saludo con voz suave

- ¿Cómo te sientes?- pregunto Alice

- pues bien, un poco desanimada en realidad...

- ¿Y eso?..

- No queda mucho para que regrese a casa...

Los demás la mismo con un poco de tristeza, tenía razón ya solo faltaban días y no semanas o meses. El tiempo pasa demasiado rápido y la sbuenas cosas siempre tiene su fin.

- Hey! Quita esa cara larga y disfruta de este hermoso momento, venga vamos a jugar un poco...

Y así fue jugaron y jugaron hasta ya decir, no más...


Pasaron unas horas y a los chicos les tocaba un poco de práctica para el día del show que quedaba para unos meses.

- Oye Bendy! ¿Qué piensas hacer?- pregunto dulce desde el suelo viéndolo ver una hojas

- Pues tocar la guitarra..

- ¿Y esa canción es?

- No daré spoilers, tramposilla- sonrió mientras tocaba su nariz

Dulce río, estos dos se estaban llevando bien y eso hacía alegre y olvidar los problemas a dulce, se sentía libre de dolor y soledad por fin después de casi tres años.

Dulce salió y se despidió de Bendy para que le pudiera trabajar tranquilo sin molestia pero creo que esa pequeña salida fue un mala decisión.

- Mamá...?

Doble CaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora