What The Hell Did I Do ?

Parte 6

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Uno de los mayores dolores de la vida es recordar durante los tiempos de miseria, los tiempos en los que fuimos felices.
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El chico se dirigió hacia ella sin importar si interrumpía aquella pelea, en donde según todo lo que el escucho aquel chico con el nombre raro era el malo, la tomo de la muñeca acercándola así para cubrirla con el paraguas.

-Te enfermaras si sigues debajo la lluvia- espeto, cubriéndola con su chaqueta.

-No es necesario que hagas esto- dijo la morena.

-Pero yo quiero hacerlo, vamos -

-Zoe, perdón- dijo Alucard encontrándose aun debajo la lluvia.

-Es muy tarde, pero eso ya lo sabias ¿no?- declaro –hay cosas que no se solucionan con un perdón, pues no se olvidan de la noche a la mañana; a veces me pregunto ¿Era solo una mentira? Si lo que tuvimos fue real ¿Cómo puedes estar bien? Porque yo no estoy bien para nada.

-Desearía poder regresar el tiempo y cambiar todo lo que hice y dije-hizo una pausa y agacho la cabeza- pero no se puede, cuando veo nuestras fotos y los recuerdos que tenemos me duelen; me duele tanto no tenerte.

-Me siento solo, extraño sentirme yo mismos, yo solo extraño demasiado a mi mejor amiga; la única que nunca me abandono y la creyó en mi cuando nadie más lo hizo; desearía regresar a ese día para evitar que te rompa el corazón.- tomo un respiro- ojala pudiera regresar a todos esos momentos en donde no te demostré lo que en realidad valías -agito la cabeza- ojala te hubiera puesto de primero estaba equivocado lo admito; me quedo sin aliento por todos los errores que cometí, por todas las cosas que no hice y desearía hacer que te quedes pero sé que no lo harás, así que confiare en el destino que nos volverá a cruzar y me gustaría que me dieras una oportunidad.

-¿Te iras?- menciono la morena- ¿A dónde?

-Sí, con mis tíos ahí estudiare la universidad; al fin te dejare en paz- sonrió de lado- solo quería verte una última vez y contarte todo lo que nunca me atreví a decirte, siempre estuve enamorado de ti; tu dura forma de rechazarme todas esas veces, eras la única que no caí ante mí y yo me harte te demostraba todo lo que a nadie le había mostrado, así que te destruí como tú lo hacías conmigo.

-Gracioso ¿no crees? Nos destruíamos mutuamente, esperó que te vaya bien-

-Zoe, vamos te enfermeras- declaro Damián.

La pareja se alejó del chico, y este solo observaba como se alejaban y se sus cuerpos se hacía más borrosos y lejanos se sentó de nuevo en el paradero y se permitió llorar como nunca lo había hecho; después de todo la había perdido, como todos le dijeron que lo haría.

-¿Te sientes bien? Estas muy callada- espeto mientras cerraba la sombrilla.

-Sí, solo no sé qué decirte es incómodo- dijo mientras se acomodaba el cabello mojado- ¿Cómo supiste donde estaba? Acaso me estas acosando-menciono con una sonrisa ladina.

-Creí que estabas triste pero si tienes humor para burlarte, veo que no-negó con la cabeza- ya quisieras que alguien como yo te acose.

-La jefa me mando por ti para que no te mojes me dijo que ella te llevaría- volteo a verla- por cierto ¿A dónde vas?

-Voy al doctor, aunque como se dieron las cosas ya no-

-¿Estas enferma? Porque viniste a trabajar si lo estabas-

-No, es otra cosa camina quiero irme a casa-

El camino se hizo en silencio solo apreciando as nubes grises que poco a poco se iban deshaciendo, era cómodo y tranquilo; eso era lo que ella necesitaba en un día como hoy. Tranquilidad.