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Estaba durmiendo tan cómodamente hasta que los rayos del sol entraron a mi habitación seguido de un grito de mi mamá.

— ¡Despierta! —se acercó a mi y empezó a moverme de un lado a otro.

— Mmnhh déjame —dije tratando de tapar mi rostro con las sábanas pero mi querida madre me las quita— Mmnhh ya voy —me senté en la cama y fijé mi vista en el suelo aún con sueño.

— ¿Piensas quedarte ahí todo el día? —sacudí mi cabeza para 'eliminar' aunque sea un poco el sueño y me adentré al baño.

Primer día de clases. Un fastidio para algunos, y para otros diversión. Y en lo personal, odio el colegio.

Salgo del baño y me visto con el uniforme para luego bajar a desayunar.

— Buenos días —dice mi padre muy alegre. Yo solo le sonrio y tomó asiento a su lado. Levanto mi vista y me encuentro con mi hermano en su celular, no le tomo importancia y presto atención a lo que mi papá me dice— ¿Lista para hoy? —yo asiento con la cabeza sin ganas de hablar— Espero que este año te esfuerces mucho, no como el año anterior —suspiro y ruedo mis ojos. Siempre dice lo mismo. Mi madre se dirige a nosotros con la comida y la coloca frente nuestro.

— Provecho —se retira y busca su plato. Me quedo mirando mi comida durante unos minutos hasta que decido comer. 'Tostadas con mermelada y jugo natural', sin duda, no es de mis comidas favoritas.

— ¿Ya tienes todo listo? —pregunta mi mamá fingiendo interés.

— No —respondo seca para luego llevarme el último pedazo de la tostada a mi boca.

— ¿Hasta cuándo, Nayeon? —suspiró y negó repetidas veces con su cabeza. Yo solo me levanté y fui a ordenar mi bolso.

— Sabes, ya estoy cansada de que todos los días sea lo mismo —habla detrás de mi— Nayeon, ya vas tarde en tu primer día. —colocó su mano en mi hombro y yo rápidamente la quité. Me volteo, la miró por unos segundos y luego tomó mi bolso y salgo por la puerta.

— ¡Di adiós por lo menos! —se escuchó la voz de mi padre y yo rodeé mis ojos y seguí caminando.

La relación de mis padres y yo no es la mejor, casi nunca nos hablamos y ni nos vemos. Siempre que llego del colegio voy directo a mi habitación y de ahí no salgo hasta la mañana siguiente. Tampoco mis padres se preocupan por mí y tampoco van a mi habitación a ver qué tal estoy, solo cuando les da la gana se preocupan por su hija. Es más, pareciera que no existiera. Que su único hijo sea mi hermano. Y la verdad, ya estoy acostumbrada, para mi es mejor estar todo el día encerrada en mi oscura habitación y tener el menor contacto con mi familia.

— NAYEON —sabía a la perfección de quién era esa chillona y a la vez tierna voz. Me volteo y me encuentro con una de mis mejores amigas, Sana— ¿Me extrañaste verdad? —se acerca a mí con sus brazos abiertos dando a entender que quiere un abrazo.

— En verdad, no. No te extrañé —le correspondí a su abrazo y al instante ella lo cortó.

— Cuando el grupo de tu 'mejor amiga' se acerque a ti,—sonrió burlona a lo que yo le dí un codazo— no me pidas ayuda —me mira feo para luego pasar por mi lado chocando mi hombro. Yo río.

— Claro que sí te extrañé, Sana—ella se voltea con lo ojos iluminados y corrió en mi dirección. Yo abro mis brazos para recibirla pero ella pasa por mi lado, me volteo y me encuentro con mi otra mejor amiga, Momo.

— ¡Te extrañé tantooooo! —daba griticos de alegría. Luego se voltea en mi dirección y yo coloco mi mano en mi pecho dando a entender que me dolió cuando me dejó con los brazos estirados. Ella entrecierra sus ojos y se acerca un poco a mi— Te lo merecías, mala —las tres nos reímos.

Entramos al colegio y nos dirigimos a nuestros casilleros que por suerte quedaron juntos.

— ¿Qué tenemos ahora? —pregunta Momo. Miré el horario y respondí.

— Química —unas risas se hicieron presentes en el pasillo y todos los estudiantes que se encontraban en este guardaron silencio. Jeongyeon y su grupo, o más bien 'el grupo de los populares' estaban caminado mientras veían a todos con burla. Rodeé los ojos y seguí haciendo lo mío, hasta que la voz de Jeongyeon se escuchó detrás mío.

— Oh, la rarita aún sigue aquí—giré en su dirección y lo primero que visualice fue su mano entrelazada con la de Chan— ¿Que miras tanto rarita? —me dedicó una sonrisa creída y se acercó a mí— Este año no te creas que te libras de nosotros, ¿Oíste? —colocó su dedo índice en mi hombro y me dió un ligero empujón.

— Si, plástica. Te escuché muy, pero muy bien —ella quedó algo sorprendida por cómo la llamé: 'plástica'— ¿Algo más que quieras decir?, Estoy ocupada.

— ¿Cómo me llamaste bicho raro? —ahora su rostro no tenía esa sonrisa, si no todo lo contrario, estaba furiosa.

— Creo que no eres sorda y escuchaste a la perfección que fue lo que dije —le sonreí con la boca cerrada y me fui de ahí llevando a Sana y Momo conmigo y dejando a atrás a una muy enojada Jeongyeon.

— ¡¿Eres tonta o qué?! —exclamó Sana— Ahora no nos dejarán tranquilas ni por un segundo, Nayeon —me encogí de hombros restándole importancia a eso y entramos a la primera clase, Química.








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Holaaaaaa!!

Es mi primera historia ♥, espero les guste mucho.

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⏰ Última actualización: Nov 02, 2019 ⏰

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Impossible [2yeon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora