Todos los días despierto y tengo que enfrentarlo. Cada día es más difícil. Con el tiempo, él se hace más fuerte. Mi esposo siempre me acompaña y todos ellos me ayudan a combatirlo. Pero, tanto ellos como yo, sabemos quién va a ganar. Es sólo cuestión de tiempo para que me consuma.
Cada vez es más dificil. Él no deja de arrebatarme mis objetos más preciados, y, sobre todo, mi fuerza.
Siento que ya no puedo. Poco a poco me quita lo más importante, hasta que un día, me quite mi último suspiro, mi última idea, mi último pensamiento. Y no solo eso. Ese último pensamiento será él. Sólamente él y su estúpido nombre, ¿cómo era?...Al...A... Alzheimer...¿De qué hablábamos?
