Tres gatitos estaban viendo como su madres tomaban un baño. Estaban tan aterrados.
-Madre, no queremos bañarnos- el gatito más pequeño de color gris llamo la atención de las dos madres-
-Tienen que bañarse, ¿O quieren oler como el señor Nogh?- los tres gatitos maullaron en desaprobación ante lo que decía Camila-
Cuando ambas gatas salieron las amas tomaron a los tres gatitos para poco a poco incorporarlos en la tina.
-Ve como no es tan malo- Lauren dijo restregandoce en una toalla- Van a oler muy rico, luego les darán leche e Irán a dormir-
Camila veía todo con atención, sin decir alguna palabra. Estaba embelesada con la familia que tiene; sus amas riendo por algún comentario dado; sus pequeños siendo unos quejumbrosos intentando salir de la bañera y su amada esposa regañandolos con ese tono tierno pero severo.
Noto que no necesita más de lo que veía esa tarde, amaba demasiado todo esto.