En cierto modo me gusta el desorden. Me estresa cuando todo está perfectamente acomodado. La rigidez de las personas que maneja su vida así, nunca sucede nada interesante y deben calcular hasta el mínimo detalle de todo. Prefiero la espontaneidad al de pronto encontrar esa camisa que después de buscarla tanto tiempo te rendiste pero de repente aparece en ese lugar en el que ya la habías buscado 30 veces y así cambia todo lo que harías en el día, ya no sólo es llevar una playera, ahora también tienes una camisa y tal vez sales con algún amigo para presumir que encontraste tu camisa y tu tarde se vuelve una más interesante.
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Todo Lo Que Nunca Te Dije
Short StoryLa mayoría son pensamientos que me llegan en medio de la noche, y otros son sólo cosas que nunca me atreví a decir en el momento indicado. A veces las escribiré con el corazón roto, otras con añoranza o tal vez simplemente con un lejano recuerdo. E...