Primera Parte

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- Amor, estoy en casa – gritó ChanYeol desde la entrada esperando por la respuesta de su novio, KyungSoo.

- ¡Estoy acá en la cocina! – al escuchar su voz de inmediato corrió a él.

Ahí estaba, la luz de sus ojos, ese pequeño ser enojón, tierno y con un corazón grande y puro. Era él la razón por la que ChanYeol seguía en pie, soportando la farsa en la que estaba inmerso. Se veía hermoso con aquel delantal y la lengua ligeramente afuera concentrado en su preparación.

Con una sonrisa en los labios se acercó a él, abrazándolo por la espalda y apoyando el mentón en el hombro del otro oliendo el delicioso aroma de la comida.

- Eso luce fabuloso – alaga el más alto mientras deja un beso en su cuello.

- Llegaste temprano, ¿Cómo estuvo tu día? – pregunta con una sonrisa acorazonada en sus labios.

- Oh, la nueva canción está a nada de salir, hoy me mostraron el resultado final y practicamos la coreografía.

- Habría pagado solo para ver tus pies moverse al ritmo de la música – dijo Soo riendo de solo imaginarlo.

- ¡oye! – se queja mientras le hace cosquillas al bajito, quien se empieza a retorcer de inmediato.

- Era broma, era broma – dice entre risas, buscando que el otro pare – por favor, ve a lavarte las manos, voy a poner la mesa – termina una vez que ChanYeol detuvo el ataque y él pudo calmarse.

Ve a su novio correr al baño obedeciendo la orden dada con una sonrisa mientras niega suavemente. A veces ChanYeol es como un pequeño niño, lleno de inocencia.

Aún recuerda cuando lo conoció, era el invitado para su programa de radio y durante toda la transmisión no pudo evitar mirarlo enternecido, la manera en que hablaba y sonreía tan sincero, jura por todas las deidades que iluminaba la sala entera solo con una sonrisa.

Después de eso siguieron hablando y a los pocos meses comenzaron a salir, la manera en la que ChanYeol se lo pidió es por lejos la confesión más tierna que alguien le ha hecho. Ese día se encontraban en el apartamento del artista, llovía así que hicieron un poco de chocolate y vieron películas, hasta que el más alto busco su guitarra y con una canción lenta junto a la luz que le proporcionaba la chimenea recito sus sentimientos.

Desde ese día están juntos y ya van para tres años juntos y uno viviendo juntos, todo era perfecto... a excepción de que aún no se lo comentan a nadie, él es abiertamente gay, pero ChanYeol teme que su orientación sexual pueda arruinar su carrera como idol, así que lo mantienen en secreto. Al principio no tenía problemas con ello, entiende la presión que genera ser idol en un país como Corea del Sur; él también estuvo asustado de salir del closet y ni siquiera tenía tanta presión como él, pero ahora que tres años han pasado se vuelve cada vez más difícil seguir guardando las apariencias. Le destruye un poco por dentro cada vez que no puede salir con el libremente por la calle, cada vez que se pierde sus conciertos o que gana un premio y no puede gritar a los cuatro vientos lo mucho que lo ama y lo orgulloso que esta, no poder tomar su mano o darse un beso fuera de esas cuatro paredes lo está matando. Ama a ChanYeol como nunca ha amado a alguien y sabe que su mente y corazón le pertenece, pero teme que poco a poco la sociedad acabe con eso.

- Ya estoy listo, mi estómago ruge – apareció con su característica sonrisa y sobando su panza – ¡daebak! Necesitaba esto, hoy fue un día duro, gracias amor.

- ¿Día duro?, ¿Qué paso?

- No es nada... solo tenía ganas de regresar a tus brazos – respondió con una sonrisa un poco incomoda.

- ChanYeol... - reprochó el bajito sabiendo que escondía algo.

- La empresa sigue presionando sobre nosotros – lo dijo tan rápido que KyungSoo casi no pudo entender, pero lo hizo.

- ¿Qué? Ya vivimos de esta manera, ¿Qué más quiere esa maldita empresa? – la furia e indignación eran claros en su rostro.

- No te enojes pero... dicen que es demasiado peligroso que sigamos viviendo juntos, últimamente se rumorea que vivo acompañado y no saben cómo terminar los rumores.

- ¿Y tú qué respondiste? – el más pequeño pregunto, de repente toda la rabia que sentía se convirtió en miedo, el temor de que ChanYeol simplemente decidiera irse de su lado empezó a carcomerlo.

- Jamás me iría de tu lado – respondió de inmediato sabiendo los pensamientos que por su cabeza debían estar pasando.

KyungSoo soltó todo el aire que llevaba conteniendo cuando lo escucho, pero sabía que ahí no había acabado.

- Aunque quieren juntarme con alguna idol para distraer la atención – ChanYeol lo miraba fijamente y ahora era el quien contenía el aire sin saber que esperar.

Mientras que Soo solo estaba ahí, sin saber que decir. De repente se sintió muy cansado, como si esas palabras hubieran extraído toda la energía de si y entonces dolió, dolió porque era injusto, porque ellos no merecían nada de esto, y era ridículo vivir así, con miedo de amar y ser juzgado por ello. Sintió sus ojos nublarse y la primera gota cayó, ni siquiera él podía entender porque, pero solo quería llorar y que sus penas se colaran en cada lagrima. Siempre quiere ser fuerte para ChanYeol, porque sabe que el también sufre con todo esto, pero hoy quería ser débil, deseaba llorar y hacer una rabieta por el rumbo que su relación tomaba.

Simplemente se levantó de la mesa, había perdido el apetito y una voz dentro de él le decía que eso no era tan importante, que no arruinara los pocos momentos íntimos que comparte con ChanYeol. Pero esa noticia solo fue la gota que derramo el vaso, no podían seguir así.

- Kyunggie, no te vayas. Bebé háblame por favor.

- ¿Qué puedo decir ante esto, ChanYeol? si te digo que no lo hagas y que reveles de una vez nuestro noviazgo, ¿lo harás? – KyungSoo lo miraba fijamente, sabiendo ya la respuesta.

- Amor, sabes que si pudiera lo hiciera...

- ¿Y qué es lo que te detiene? Chan... ya son tres años y ahora tendré que aguantar una relación falsa, no sé si pueda con todo esto.

- ¡No! Soo, sabes que sin ti soy solo un cuerpo, mi alma y ser te pertenecen. No digas eso ni jugando – se levantó y sosteniendo su cintura se aferraba a KyungSoo como si en cualquier momento este se evaporaría frente a él.

Y Soo se rompió un poco más al escuchar eso, si hay algo que nunca logra soportar es a ChanYeol llorar, el hombre casi temblaba aferrado a él.

- Sabes que no te dejaría, puesto que abandonaría parte de mí mismo... pero todo esto es tan cansado.

- Te juro que quiero que las cosas cambien, pero sabes el riesgo que lleva esto, nos destruirían allá afuera.

- ¿Y es que acaso esto no está destruyéndonos también? Míranos.

- Solo dame un poco de tiempo – el desespero en sus ojos era todo lo que faltaba para que KyungSoo cediera.

Desde el inicio sabía que terminarían así, porque no quería discutir con él y aunque no todo fuera como él quería, al menos de esta manera puede tenerlo. 

Volvieron a sentarse y terminaron su plato. El ambiente estaba triste, parece que los dos amantes le contagiaron su sentir.

Al acabar fueron juntos a su habitación e hicieron el amor queriendo consolarse el uno al otro; olvidándose de todo el mundo para sentir que solo eran ellos ahí; dándose promesas silenciosas y repartiendo besos por sus cuerpos, con la esperanza de que fuera suficiente para sanar todas las heridas. Claro que esto no era fácil, pero lucharían por este amor.

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Love Stereo (two shots) CHANSOO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora