Lis, se levanta más acelerada de lo usual. Está tensa otra vez. Ni siquiera tuvo que esperar a que la alarma de su despertador de mesa sonara, su corazón acelerado y las pésimas horas de sueño hicieron que casi permaneciera en vela.
Su vida, durante los últimos años, se ha mantenido relativamente en calma, pero eso no es indicio de que su mente lo esté. Sólo tiene 26 años y ya se siente vieja, siente que la vida se ha encargado de ponerle tropiezos en la vida, los cuales considera sólo eso, tropiezos. Sabe que todo el mundo cae pero no todos se levantan y ella está dispuesta a hacerlo las veces que sean necesarias.
Se dirige al baño y toma una ducha que le quita la retahíla y se viste con su mejor ropa. Bueno, la verdad es que es sólo un conjunto formal sencillo el cual compró de oferta en alguna venta de ocasión, y sólo porque sabía que a veces es obligatorio vestir de acuerdo a algún a situación más seria. Pero la moda no es precisamente su fuerte ni es algo que realmente le agrade.
Lis, es de contextura media y su altura no supera el 1,68 metros. De tez blanca y ojos de un extraño color similar al jarabe de arce. Afortunadamente, se mantiene en buen estado físico sólo gracias a sus duros entrenamientos que comenzaron mientras estudiaba Literatura Inglesa y Americana en la Universidad. No era buena en los deportes pero sabía que debía entrenar duro si quería lograr sus metas y sabía, también, que si bien los libros eran algo de lo que más amaba en la vida, estudiar esta carrera sólo era un paso hacia un destino diferente.
Salió de su pequeña casa a las afueras fueras de la ciudad en un tranquilo vecindario, subió a su city car azul que no pensaba cambiar aunque estuviera pasado de moda, y emprendió rumbo a Quántico. Llegó con tiempo de sobra y entró con la esperanza de que esta vez las cosas fueran distintas. Hacía exactamente un año atrás que había pisado el edificio y la había recibido el Jefe de la Unidad, Aaron Hotchner y rechazó su postulación como ya lo venía haciendo por dos años seguidos. Sí, porque en tanto salió de la Universidad fue a postular, sin embargo no tenía experiencia en nada relacionado con la Policía más allá de lo que había estudiado por cuenta propia. Entonces ya era su cuarta vez en ese edificio y esperaba conseguir el puesto sí o sí.
ESTÁS LEYENDO
Hate (Love) Me, Dr. Reid.
FanfictionHistoria inspirada en el personaje de ficción, Dr. Spencer Reid, de la serie Mentes Criminales. Los detalles relatados en cada capítulo no necesariamente tendrán una base exacta a los acontecimientos ocurridos en la serie, ni los personajes aparece...