Máscaras

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Ella era una hermosa señorita... Ella tenía una sonrisa tan cálida, un cuerpo perfecto, era muy inteligente y a pesar de eso era muy humilde; trataba bien a cualquier persona, incluidas las personas que hablaban mal de ella, siempre fue elogiada por lo que hacía, también tenia una maravillosa familia...
Pero ¿Me creerían si les digo que todo eso es mentira?
Ella sí tenia un agradable aspecto físico, pero las emociones que expresaba y su supuesta familia feliz era una farsa.
Ella no era feliz, nunca lo fue, pero tuvo que obligarse a verse feliz... Sus padres solo la aceptaron por su gran intelecto, ella tenía una pasado del cual nadie supo, ella estaba profundamente sumergida en depresión y nadie se percato de eso, nadie vio su sufrimiento, todos solo veían a la perfecta chica esperando a que se equivocara en lo más mínimo para criticarla y decir cosas que no venia al caso, lo único que ella quería es ser feliz por eso soporto tantos años, sin embargo, ella se canso de todo, ya no podía más estaba agotada de luchar sola contra todo, de sonreír cuando estaba mal, de ayudar a los demás sin recibir ninguna ayuda, estaba cansada de intentar ser fuerte... Y después de tantos años se suicidó.
Al principio nadie podría imaginar una razón del por qué lo hizo, si aparentemente tenía una vida digna de ser envidiada... Pero después de leer la carta que ella dejó, comprendieron todo y de alguna manera se sintieron culpables de no haber hecho nada por ella, solo asumieron que ella siempre debía estar bien porque supuestamente su vida era perfecta, se dieron cuenta de que todo lo que vieron fueron solo máscaras que ella creo para hacer feliz al resto pero no a ella misma.

FRASES IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora