Parte 4.

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Cuando el líder de los elfos le dijo eso a la hada, ella se fue al trono de los trolls.
Me fui con los duendes y empecé a contarles lo que paso, ellos estaban sorprendidos y el nuevo jefe de los duendes me dijo
Jefe duende: tienes agallas para a verte enfrentado a ese dragón, pero ya dejemos eso atrás, lo que importa por ahora es enfrentar a los trolls, sabemos que están bien reforzados, pero tenemos un arma secreta para ellos.
Yo: los dragones?
Jefe duende: si, los dragones, no se si ganemos, pero de algo estoy seguro es que podemos matar al jefe de los trolls y si eso pasa, los trolls no sabrán que hacer
Pupilo: jefe, pero si ellos tienen un as bajo la manga, que aremos?
Jefe duende: tranquilo, solo debemos mantener la calma, eso sera un juego de ajedrez, usaremos todas nuestras estrategias, para ganar
Pupilo: pero no se porque, pero siento que esto saldrá algo mal..
Yo: tendremos que rodear el castillo de los trolls, para tener todos los sectores cubiertos y así poder atacar de todos lados,
Jefe duende: tendremos que buscar a los enanos, si es que no se unieron a los trolls, bien, el elegido y mi pupilo irán al reinado de los enanos,
Jefe de los elfos: no esta mal, pero que lleven arcos y flechas porque entrar ahí no sera nada fácil
Yo: bien, esto sera interesante

Empezamos a empacar algunas cosas, comida y agua, agarramos un arco y flechas, para viajar a el reino de los enanos
Yo: saldremos al amanecer
Pupilo: si señor

Ya eran las 4 de la mañana, agarramos nuestras cosas y salimos de el lugar rumbo al reinado de los enanos, pensábamos que este seria nuestro ultimo viaje, el pupilo se miraba muy extraño, no sabia porque, no le puse atención y seguíamos caminando, use el ojo de dragón y llame a dos dragones, ellos llegaron rápidamente, se inclinaron ante mi y el pupilo y yo subimos sobre sobre ellos.
Yo: pupilo, llegaremos mas rápido por aire, así que sujetate fuerte de el dragón
Pupilo: bueno señor

Los dragones empezaron a volar y nos llevaron rápidamente al reino de los enanos, todo se miraba muy lúgubre y sombrío, muchos arboles secos, parecía como si algo paso por aquí, bajamos de los dragones y continuamos a pie, se escuchaba un sonido muy extraño a lo lejos, seguimos caminando sin prestar mucha atención, llegamos a una piedra enorme, se escuchaba una niña cantar le dije
Yo: niña baja de ahí, necesitó preguntarte algo
Niña: lala- larala-...
Yo: por favor, es muy importante
Niña: es tan importante que sacrificarías tu vida por saber lo que necesitas?
Yo: si...
Niña: bien, tu y tu pupilo vengan conmigo

La niña bajo de la piedra sin dejar de mostrar su rostros, nos mostró la entrada al reino de los enanos, le di las gracias y ella dijo: no digas nada, solo sigue tu camino y veremos si sobreviven los dos
Ella se desapareció en la oscuridad con una risa terrorífica, seguimos caminando y empezaron a tirar flechas por todos lados, el pupilo y yo nos escondimos en una cueva, a lo lejos se escuchaban voces y unos pasos rápidos, era un minotauro, salimos corriendo del lugar, tratamos de escapar pero atraparon al pupilo, quede solo en este lugar sombrío, seguí el camino, estaba algo asustado, me escondí en una pequeña cueva con ratones, trate de descansar un poco...

La llegada del elegido y la batalla contra los trollsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora