Micro Historias

PESADILLA CAMINO A CASA

Yo, soy una persona escéptica, por mi trabajo, debo viajar mucho de un lado a otro, así que un día, después de un largo día de trabajo, me subí al autobús, para volver a mi hogar, y como busco comodidad, ya que es un viaje de toda una noche, siempre, me voy en un bus de dos pisos, y elijo el primer asiento de adelante, del segundo nivel. Bueno, luego de un rato en curso, comencé a sentir algo de sueño , y como a mi alrededor , la mayoría estaba durmiendo, decidí acomodarme en el asiento, mientras comenzaba a sumirme en un sueño, pude escuchar a las personas del asiendo de a tras hablar sobre un accidente a pocos metros de donde nosotros estábamos, eso explicaba un poco aquellas luces tintineantes de antes, no le tome importancia, pues estaba demasiado cansada para pensar en eso, pero me mentía a mí misma, pues aunque llevara los ojos cerrados, mi mente no dejaba de pensar en aquel accidente, no fue hasta entonces, cuando nos acercamos al lugar, que el bus en el que iba, se detuvo en un golpe seco, rápidamente abrí mis ojos, para poder saber que era lo que ocurría, al igual que el resto de las personas, comencé a mirar por la ventana, aquel trágico accidente, se podía distinguir a las patrullas y a las ambulancias en el lugar, pero algo en particular llamo mi atención, al igual que en el bus que nosotros viajábamos , era de dos niveles, el suyo era verde y era la marca Mic , el nuestro era azul y gris, la marca era una luna, pero en lo que más se diferenciaba, era que en el segundo nivel , para el mismo lado que yo me encontraba, el vidrio estaba roto, como si algo hubiera entrado con gran fuerza, o salido de él , mientras la conmoción pasaba, un chico, que vestía unas prendas deportivas, aunque algo sucias, lo asimile a que pudo haber estado ayudando , luego de que el tomara asiento, el bus volvió a comenzar su ruta, el chico que estaba a mi lado, esbozó una sonrisa amistosa, a la cual yo le devolví el gesto, para luego mirarme por unos minutos antes de hablar:

--.Que desafortunado.

-.Cómo?

--.Aquel accidente.

-.Sí, es una pena.

--. Hoy que no hubo ningún sobreviviente, es una lástima, esas pobres almas debieron sufrir bastante antes de morir.

-.Yo creo que solo fue una muerte rápida, ya que no creo en eso de que las almas rondan o que suelen aparecerse.

Era la verdad, pues a pesar que de niña veía muchas películas de terror e intentaran asustarme después, nunca les tuve miedo, pero aún rondaba en mi la curiosidad, sobre aquel chico, así que , me acomode en el asiento para poder charlar con el

-.A dónde se dirige?

--.Voy a Fumillan

-.Oh, enserio?, yo también me dirijo hay, va a algo en específico?

--.Voy a visitar a mi familia, ya que no la veo hace mucho tiempo.

Esas palabras dieron un eco en mi cabeza, ya que mi padre murió cuando yo era pequeña y mi hermano estaba en el ejército, ya de más grande me mude y mama se quedó con su hermana en nuestra antigua casa

--.Es una bonita noche.

-.Está el cielo despejado.

Cuando aquel chico, me miro sonriendo, pude notar un pequeño lunar en la parte izquierda de su labio inferior, pasamos hablando durante un tiempo, hasta que el sueño volvió a mí y no pude determinar en qué momento, me dormí completamente, para despertar al poco tiempo después, aún era de noche, lo cual era extraño, ya que para mí, antes de dormirme, estuvimos mucho rato hablando, y sobre eso, cuando desperté, el ya no estaba a mi lado, supuse que pudo haber ido al baño, ya que que como el de abajo era el más cercano, yo tuve que ir al del fondo del pasillo, una vez tomado mi tiempo, cuando salía para volver a mi asiento, el bus, comenzó a dar unos giros demasiado bruscos, tanto, que tuve que ir de lado en lado, cuando ya estaba a la mitad de aquel pasillo, escuche algunos gritos provenientes de abajo, ya un poco preocupada, saque algo de estabilidad , para poder llegar a mi asiento, hacia demasiado frió, lo cual era raro, porque estábamos en verano, y aunque las noches podían ser frías, yo me sentía bien abrigada, mis pensamientos fueron interrumpidos, cuando escuche al copiloto gritar que nos abrocháramos los cinturones, yo en un acto de miedo, comencé a desesperarme, porque no podía encontrar la otra parte del cinturón, era como si solo mi asiento no estuviera preparado para una emergencia, por la conmoción del momento, olvidaba a aquel chico que estaba conmigo, me extrañaba que con todos esos gritos alarmantes no corriera a asegurarse, fue entonces cuando al fijar mi vista en la ventana frente a mí, pude ver el reflejo del pánico en las personas que estaban en ese piso conmigo, me iba a cambiar de asiento cuando el bus choco brusca mente con una parada de autobús, sacándome despedida a través del vidrio y haciéndome llegar a una distancia del bus, pero antes de que mi cuerpo tocara el suelo, todo se puso oscuro, ahí fue cuando desperté de golpe con el sonido del parlante, avisando la pronta llegada del bus a su destino, mire a mi alrededor con miedo, mi corazón sentía que saldría de mi pecho en cualquier momento, todo estaba en su lugar, intente explicarme a mí misma lo que había sucedido, pero al no encontrar ninguna explicación lógica, lo deje como un mal sueño, pasaron las horas y ya estaba en mi departamento, así que decidí prender mi televisión , como era de costumbre, pero a penas la prendí, hablaban de aquel accidente.

-.Genial! yo queriendo olvidar y me sale esto.

Estuve a punto de cambiarla, cuando comenzaron a hablar de las personas que habían muerto, y a mostrar fotos de ellas, fue entonces cuando sentí un frió, que comenzó a recorrer desde mi nuca hacia la planta de los pies, estaba ahí! aquel chico! su tenida deportiva, el lunar en el mismo lugar!, estaba completamente aterrada, luego mi miedo se hizo más grande cuando dijeron que aquel chico no más de 22 años, había sido encontrado unos centímetros mas adelante de donde ocurrió el accidente, ya que fue eyectado de su asiento, porque este no tenía la otra parte del seguro, y no pudo abrocharlo, muchas cosas vinieron a mi mente, el sueño, yo siendo eyectada, a mi hablando con él, ante lo último me quede inmóvil un rato, con quien estuve hablando todo este tiempo, comencé a cuestionarme, como pude conocerle si yo estaba dormida, comencé a cuestionar mi propia razón.

Ya de lo ocurrido, ha pasado un año, no se lo he querido contar a nadie, aunque no sé si me creerán, ni yo me creo cuando quiero darles vueltas al asunto, ahora con todo lo ocurrido, no sé si creerlo o solo ser escéptica como siempre pero lo que si jamás olvidare el miedo en sus caras antes del accidente