Thor nunca gustó de levantarse temprano.
Desde que vive con sus amigos Midgardianos y con Loki en la Torre Avengers, tiene que levantarse temprano para ir a sus misiones como el héroe que era.
Levantarse temprano, un tener que interrumpir su descanso lo ponía de malas, le gustaba dormir hasta tarde.
Ahora estaba en medio de un campo lleno de pasto bastante alto, el cielo con unas tantas nubes, y solo estaba el y una especie de brillos extraños color amarillo ser llebados por el viento.
Estaba sentado, tranquilo, era relajante.
Todo era perfecto, bueno casi, ya que se sentía bastante solo en un lugar tan lindo, pero de todas maneras era una linda sensación.
Todo estaba de lo mejor.
Hasta que tubo que escuchar ese maldito sonido del infierno digno de ser creado por un ente como Hela para torturarlo, pero sólo era la alarma que su amigo el hombre de lata le había puesto.
Abrió sus ojos con pesar y fastidio, apago la maldita alarma de un manotazo, tubieron que hacer un aparato más resistente para el, pues había roto unos cuantos al apagarlos de esa forma.
Se sentó y se quejo en voz alta, rasco su cabello corto, como extrañaba su pelo largo.
Suspiro y se levantó, el resto del día siguió su transcurso normal.
Como era de costumbre, fue a hacer una misión con sus amigos, en la mañana estaba terrible, y parecía que si apenas lo molestaras un poco una tormenta empezaría a reinar en el cielo despejado y un rayo caería a quien ose molestar al dios del trueno, más rato ya estubo con una actitud más renovada en la tarde, estando con su hermosa sonrisa de siempre, pero no tan animada y energética.
Tony notó esto, y con Steve quisieron hacer algo.
- oye Bich boy, te noto algo más decaído y con con una actitud como tormenta desde que te despertaste ¿pasa algo? - castaño y rubio se acercaron al Dios quien comía lechuga en la cocina.
- emm... bueno, podría decirte que la alarma que me pones, amigo de metal, es bastante molesta y odio despertar con ella - hablo. Con la boca llena y metiéndose más lechuga en la boca.
- ohh... con que eso es... - Steve miró a Tony y Tony miró A Steve.
- ya se como arreglar eso, te sorprenderás, vamos Capipaleta - Tony tomó la mano de Steve y se fue a su taller.
Thor miró con una ceja a sus amigos Midgardianos mientras un masticaba un trozo grande de lechuga que la mitad y apenas cabía en su boca, parecía una vaca comiendo pasto.
Se encogió de hombros dejando de lado lo que pasó con su amigo soldado y el hombre de metal, continuó comiendo sus ensalada, Loki decía que era bueno para el.
Loki había empezado a preocuparse un tanto por su salud, pues vio que el no se cuidaba muy bien, así que el azabache empezó a cuidar de él.
Thor se puso muy feliz cuando vio que la relación entre Loki y el se había reforzado y arreglado después del Ragnarok, además de que ahora por fin podían tener una relación amorosa sin problemas ni tantos conflictos, eran felices juntos.
Luego de perder su hogar, Loki fue último que tenía de Asgard, Loki era, es y será la persona que más ama en todo el universo.
Su madre, padre, hermana, amigos, hogar, martillo, su ojo e incluso su cabello, lo había perdido todo ya, pero ahora tenía una nueva arma, su hacha. Y sobre todo lo demás, aún tenía a su querido Loki.
Lo que más amaba de vivir allí en Midgar con sus amigos, era poder vivir con Loki, poder abrazar y demostrar todo el cariño que le tenía al azabache.
El hombre de metal y el mago extraño habían tenido unos problemas con Loki, pero al poco tiempo lo resolvieron y se dieron cuenta que tenían varias cosas en común, ahora eran buenos amigos.
Loki logró socializar bastante con sus amigos y ahora todos se llebaban genial.
El y Loki vivían felices por fin, viajan a ver a Valkiria y Carol en Nueva Asgard a ver y ayudar a su pueblo de vez en cuando, ambos eran los reyes de Asgard, Valkiria era su general de ejército.
Thor era feliz, feliz de verdad, o bueno casi.
La alarma asquerosa que tanto odiaba era lo único que arruinaba sus días, lo despertaba y lo dejaba de mal humor por horas todos los días.
"tú temperamento por la mañanas se asemeja a la de una tormenta" Solían decirle sus amigos cuando se le pasaba el mal humor.
Suspiro y trago su último trozo de lechuga, y con cuidado lavó su plato y tenedor.
Siguió el día normal, y llegó la hora de dormir, cansado se tiró a su cama de cara, Loki entró a su cuarto como era costumbre, el de ojos verdes solía ayudarlo a dormir con su magia, pues a Thor no le gustaba dormir solo, y a Loki no le gustaba que el rubio se moviera tanto al dormir, así que prometieron que Loki iría a su cuarto y estaría con él hasta que el mayor se durmiera, ahora lo hacen siempre, además de que la magia de Loki ayudaba a Thor a tener sueños tranquilos y reconfortantes.
Thor se acomodo en su cama y Loki puso sus manos en su cabeza.
- buenas noches Thorpe - dijo antes de irse Loki por la puerta sin dejar antes un beso en los labios del rubio.
- buenas noches Loki... - Thor musito antes de caer dormido con una sonrisa.
Thor durmió de maravilla, de nuevo aquel lugar que en su sueño pasado, pero ahora ya no estaba solo, ahora tenía a Loki y a Frigga a su derecha e izquierda, su dos manos eran entrelazadas por ellos, sonrió contento, el lugar era hermoso para pasarla solo, y a él nunca le gustó estar solo.
Ahora el lugar desaparecio y unos ruidos leves pero dulces aparecieron. Era como ¿una voz? Era relajante.
Abrió sus ojos saliendo de su sueño, vio a Loki allí sentado frente a él y con su mano en su hombro.
- hasta que despiertas Thorpe, hay misión así que vamos, arriba - Loki sonrió y sus ojos esmeraldas conectaron con los ojos Zafiro de Thor, este sonrió de vuelta.
Loki le dio un beso de buenos días, uno de esos que a él le encantaban.
Que buena forma de despertar, se levantó y se ducho y cambió.
Tomó la mano de Loki y salió corriendo a donde siempre se juntaban, la cocina, siempre se cuenta el plan y la misión mientras se desayuna, tenía una sonrisa de oreja a oreja y estaba radiante.
Los que iban a la misión ya estaban en el Quinjet, volando por los cielos.
- ¿y ese cambio tan repentino de Thor? Parece más animado que de costumbre - habló Natasha hacia Tony y T'challa que ambos compartían sus donas.
- pues si, obvio ¿no habías notado que su despertar con esa alarma lo ponía de malas? - Tony volteo a mirar a Nat.
- pues... no- Natasha se rasco la nuca.
- yo tampoco, hasta que me lo dijo y tube que tomar unas medidas, así que tal y como hizo Steve conmigo, hable con Loki para que el lo despertará porque, nada mejor que la persona que más quieres para despertarte - Tony orgulloso de su decisión comía con la cabeza en alto.
- ¿ah sí? - T'challa susurró mirando a Thor y a Loki sentados y hablando, y vio cómo Thor estaba más que contento y feliz que cualquier mañana.
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~ αℓαямαs ~
FanfictionTodo el mundo odia las malditas alarmas, interrumpen sueños y buenos descansos a horas que odiamos levantarnos. Pero hay siempre una cura para el odio a elllas.