la lista de san [woosan]

Parte única

Choi San estaba enamorado de su mejor amigo.

Eso suena bastante lindo, ¿no? Enamorarte de una persona en la que confías plenamente y sabes que estará siempre para ti. Alguien que es como tu alma gemela, que te comprende mejor que nadie, con quien puedes ser tú mismo y hacer toda clase de locuras porque sabes que no te juzgará y, de hecho, te acompañará en lo que sea que hagas. Bueno, Jung Wooyoung era todo eso para San. Había encontrado en él a su persona ideal y se enamoró sin poder hacer nada para evitarlo.

¿El problema? Wooyoung no sentía lo mismo por él.

San estaba convencido de eso, y ya estaba cansado de esperar alguna señal de parte de su amigo que le motivara a confesarle sus sentimientos. ¡Él lo único que quería era encontrar a su alma gemela y poder estar en pareja con ella! Quería estar enamorado y ser correspondido. Quería vivir una historia de amor cliché en donde no fuera rechazado al momento de declarar sus sentimientos y terminara viviendo feliz por siempre. El problema era que él quería todo eso con Wooyoung... ¡pero nada daba resultado! San realmente se esforzaba en hacerle notar sus sentimientos sin tener que decírselos directamente, pero su amigo o se hacía el tonto o no se daba cuenta, y eso había logrado que terminara por perder cualquier esperanza con él.

En resumen, San simplemente ya se había cansado de esperar encontrar ese amor de películas en Wooyoung, y es por eso que se le ocurrió una magnífica idea para encontrar a su alma gemela y olvidarse de él de una maldita vez por todas.

— ¡Chicos! —gritó San desde el salón de la casa que compartía con todos los miembros de ATEEZ, sentado cómodamente en la mesa del comedor mientras comía un tazón de cereal—. ¡Ya despierten! ¡Quiero decirles algo!

San esperó pacientemente a los miembros. El primero en aparecer fue el líder, Hongjoong, quien le preguntó qué hacía despierto tan temprano y por qué les gritó para despertarlos, a lo que San respondió que lo sabría luego. Después apareció Seonghwa, demasiado somnoliento como para preguntarle algo, y a los segundos después llegó Yeosang. El resto apareció varios minutos más tarde, cuando Seonghwa ya había terminado de preparar el desayuno para todos, siendo Wooyoung el último en llegar a la cocina.

— San, ¿ya nos puedes decir por qué andas gritando desde tan temprano? —le preguntó Yunho en tono de reproche mientas se frotaba un ojo. El resto lo miró también, esperando su respuesta.

— ¡Está bien! Ya que muestran tanto interés les voy a decir. —San sonrió y sacó del bolsillo de su sudadera una hoja doblada por la mitad—. ¡Hoy decidí comenzar con la búsqueda de mi alma gemela!

Hubo unos segundos de silencio en los que solo se escuchó a Wooyoung toser porque se había atragantado con su comida, pero San no le prestó atención.

— He hecho una lista con las cosas que busco en una relación de pareja y los primeros a quienes entrevistaré para ver si cumplen con lo que busco serán ustedes. —San abrió la hoja y la extendió, volteándola para que los demás vieran su contenido—. ¡Será muy divertido!

Más silencio. San los miró a todos, especialmente a Wooyoung para ver si obtenía alguna reacción de su parte, pero como siempre... no hubo nada. Su mejor amigo estaba demasiado concentrado en su desayuno como para prestarle atención. San intentó ignorar el dolor en su corazón.

— ¡Bien! —exclamó, esbozando una sonrisa forzada—. ¿Quién de ustedes va a ser el primero?

Todos huyeron a sus habitaciones apenas terminó de hablar, dejándolo solo con Wooyoung en la mesa, porque él todavía no terminaba de comer. San soltó un suspiro, sabiendo que tal vez a sus miembros debía parecerles una ridiculez lo que estaba haciendo, pero para él realmente era importante y si tenía que obligarlos a que respondieran a su maldita encuesta, entonces lo haría. Por eso, San se levantó, decidido a entrar a la habitación más cercana y obligar a los que estuvieran dentro a participar.