1. Creando asesinos

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No se trata de algo real. Bueno, almenos eso creo. ¿En algún lugar del mundo, algún grupo de personas se encargará de crear asesinos?. ¿Es posible?. Bueno, el día de hoy desperté asustada. Haciéndome esas preguntas entre otras. Les cuento:

Estaba en el centro de la ciudad, en donde hay un pequeño domo, al parecer estabamos yo y dos amigos más (quienes no puedo identificar) celebrando algo importante. A mi derecha había un edificio viejo y abandonado, todos disfrutaban del momento y nadie se preguntaba sobre lo extraño que era ese edificio, y menos sobre la gente que arrivaba en automóviles de último modelo junto a sus escoltas quienes en un abrir y cerrar de ojos desaparecían sospechosamente.
Pero claro, como yo soy muy curiosa y nada miedosa (cosa que en la vida real no es así) me acerco al edificio para acariciar sus paredes, y me pongo a pensar "¿Cuántas historias tendrá por contar esta edificación?", tenía demasiadas grietas, parecía que le faltaba poco para destruirse.

Acaricio un automóvil blanco muy lujoso que se encontraba estacionado en la entrada principal, cuando comienzo a escuchar cada vez más cerca a un grupo de personas.

Me escondo detrás de un coche viejo, y uno de los guardaespaldas alcanza a verme y grita: "¡HAY UNA CHICA!" y se lanza corriendo hacia mí.
Por alguna extraña razón y sin encontrar explicación de cómo fue, yo tenía las llaves de ese automóvil viejo en la mano. Quizá en ese carro llegamos al lugar del evento y me dieron a cuidar las llaves, no lo sé.

Asustada intentaba encenderlo pero no lograba conseguirlo, hasta que por fin lo logré. Arranqué y me alejé un poco de aquél lugar. Mis amigos no notaron mi ausencia, pues nunca recibí una llamada de ellos. Pero lo más raro era que yo sin saber manejar en la vida real, manejaba a la perfección ese auto.

De lejos observo que esas personas se retiraban del lugar, enciendo el motor e intento pasar desapercibida, en caso de que otro automóvil de ellos llegue. Lo estaciono cerca y me sercioro que no haya nadie cerca para así poder entrar. Cuando de repente mis amigos aparecen y uno de ellos me dice "¿Dónde carajos estabas? Te hemos estado buscando, no entraba ninguna llamada, al parecer la señal se saturó." Yo emocionada les empiezo a explicar que hay algo raro en ese edificio, y que me gustaría entrar a descubrirlo.

Mi otra amiga mirándome raro me dice "A ver, ¿Estás bien? ese edificio está abandonado desde hace muchos años, no hay nada ahí dentro, lo único que podrías encontrar son ratas, quizá gatos negros utilizados para hacer alguna especie de ritual o magia negra, yo qué sé, pero antes era una estancia, creeme que no querrás entrar ahí, quizá encontremos cosas bastante desagradables". A mí me encanta descubrir las historias de todo, entonces le respondo "mejor aún, quizá encontremos algo interesante, algo como un..."
"¡un diario!", me interrumpe mi otro amigo. "¡Exacto!" grité emocionada.

Alto, no les dije el nombre de mis amigos porque como mencioné, no sé quienes sean, pero al parecer los conocía de hace mucho tiempo, entonces vamos a asignarles nombres: a mi amiga llamemosle Isabel, porque me gusta ese nombre, y a mi amigo llamemosle Erick, así no nos confundiremos tanto. Bien, continuemos.

Erick entusiasmado intenta convencer a Isabel, hasta que finalmente accedió a entrar con nosotros, la verdad esque yo tenía más miedo que ella, pero no le prestaba mucha atención a eso, porque estaba enfocada en que en ese lugar había algo realmente, y no era algo paranormal, era algo misterioso, sentía que estaban ocultando algo ahí.

Cuando nos acercamos a la puerta proncipal, nos percatamos que tenía una cerradura especial, no había forma de abrirla, entonces decidimos esperar a que llegara otra de esas personas extrañas. Nos escondimos detrás de una pila de cajas de madera viejas, mientras nos acomodamos se escuchó la llegada de uno, no podíamos ver nada, entonces a señas le digo a Erick e Isabel que en cuanto dejemos de escuchar pasos silemciosamente vayamos directo a aquella puerta. Y así fue, sólo pude escuchar soplar al viento, y una última persona riendo. Me asomé y vi un coche color negro, un audi. Al haberme serciorado de que no hubiera alguien cerca, nos acercamos a la entrada y efectivamente como esperabamos, estaba abierta. Teníamos miedo de entrar, entonces Erick fue el primer valiente, y nos hace seña de que está libre el área. Nuevamente, desaparecieron esas personas sospechosamente. "¿A dónde habrán ido estas personas?" me preguntaba mientras exploraba el entorno. Era sorprendente la cantidad de polvo que había. La verdad es que el lugar no tenía muchas cosas dentro, aunque nos encontrábamos en el lobby, podría decirse.

Mientras duermo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora