En un instante

El cuarto instante

Como casi todos los viernes salí con mis amigas, está vez fue a un lugar +18, entramos obviamente con identificaciones falsas.
Cuando estaba en la parte más buena de la fiesta, a eso de las 4, me metí a él medio de la pista a bailar, estaba lleno de personas, al dar la vuelta en un momento choque con un chico, me di la vuelta y si, era Él, Manuel .
Él me miró fijo, sentí como me desnudaba con la mirada, parecía que había tomado.
Me miró y sin decir nada me tomo de la cintura, suavemente me besó y yo le seguí el beso.
En un pequeño pero placentero instante sentí como sus manos se deslizaban por mi cuerpo hasta llegar a mi trasero. Mordí su labio inferior y el intento introducir su lengua en mi boca, pero el beso fue interrumpido por José.
Él era un chico con el cual había tenido una historia pero resultó ser muy tóxico y agresivo, yo pensé que no lo volvería a ver, el me infundía un miedo terrible.
José me tomó de la muñeca y me dio un fuerte sacudón. Un escalofrío recorrió mi cuerpo al escuchar su vos reclamandome el beso.
Manuel lo enfrentó, cerro su puño y le dio una golpiza, yo trate de separarlos pero fue en vano, lo único que conseguí fue un bello morenton en el hombro por parte de José.
Mis amigas inmediatamente acudieron por mí y me rescataron de ese momento tan horrible.
Estaba temblando cuando salí del boliche, no lo podía creer, yo pensé que jamás en la vida lo volvería a ver. También estaba muy preocupada por Manuel, pero en el fondo sabía que el estaba bien.
Mis amigas no dijieron nada, simplemente me abrazaron, las amo mucho, siempre saben que hacer , ya que saben que yo no soy de hablar en momentos tensos , pero me canta sentir que están para mí.
Por un instante ví como la puerta del boliche abriéndose, era Manuel, le estaba sangrando el labio y la ceja, me acerque inmediatamente para ver qué tan profundos eran los cortes.

- Te duele mucho ? -Pregunté
- La verdad que sí, pero no tanto como ver cuándo te lastiman .

Yo no entendía bien porque había tanta confianza si nos conocíamos, nos habíamos visto solo cuatro veces, era raro, pero desde el primer instante sentí una conexión muy fuerte con el.

Mientras le aplicaba el hielo en la ceja el me rodeó con sus brazos, sentí su calor corporal, delicadamente acerco su boca a la mía, lento pero seguro beso mis labios, sentí un cosquilleo que recorría todo mi cuerpo.