Una colección de varios Au!

Au! Ghosbusters

Jack Kline a sido un desempleado en todo el tiempo que había entrado a la universidad. Con su madre muerta y un padre ausente necesitaba el dinero para poder pagar sus estudios. Entonces una oportunidad se abrió, buscaban a alguien para que ayudara en una compañía nueva. "Ghostbusters" Así se llamaba.

-Suena ridículo pero la paga es buena, así que...-

El lunes temprano se presentó en el lugar indicado con un traje formal y un bastante curiosidad. El lugar era bastante grande con para que fuera algún tipo de broma o que lo hayan engañado, pero no había nadie a parte de él. "Tal vez solo me van a extorsionar y a quitarme todo los órganos" Jack tragó duro mientras la idea de irse se coló por su mente. Después de unos minutos de esperar pacientemente un hombre de mediana edad lo hizo pasar, era alto, de cabello negro y ojos azules. No dijo absolutamente en el trayecto a su escritorio además del "pase" cuando lo invitó a entrar. Se sentó.

-Así que, Señor Kline. ¿Cree usted en los fantasmas, hombres lobo, vampiros, genios, wendigos...-

El hombre empezó a enumerar una serie de criaturas mirando un papel que sostenía en la mano, Jack estaba inquieto e intentó responder.

-Yo n-...-

-ángeles, demonios, Dios, sirenas, etc?-

El hombre de ojos azules lo miró esperando una respuesta convincente. El menor se sintió cohibido a responder "Hazlo por tus estudios..." Pensó.

-Umh, si hay un salario fijo. Creeré en lo que usted me diga-

El secretario alzó una ceja pero le entregó un papel de lo que parecía ser un contrato.

-Firme aquí, empezará al instante sus labores y le entregaré su uniforme...-

Comentó levantándose y arrogandole una pluma al chico. El mayor se dirigió a una gran puerta que había a lado de su escritorio.

-Ah, perdón. ¡Aún no se su nombre!-

Jack gritó mientras escribía su firma en el papel rápidamente.

-Castiel, Castiel Novak-

El señor Novak entró a la otra habitación. Jack frunció un poco el ceño. ¿Para que exactamente necesitaría un uniforme? Él solo iba a ser un ayudante allí. Mientras divagaba un sonido llegó a sus oídos, parecía un auto pitando la bocina. La puerta de la habitación nuevamente se abrió y vio como Castiel se acercaba a la puerta principal de lugar para abrirlo lo más rápido que pudo.

-¿Pero qué está pasan-...?-

De la nada apareció un auto negro con dos personas dentro. El que conducía tenía el cabello rubio y una fachada de que había luchado con un tigre, a su lado iba a un tipo alto de cabello largo el cual apenas se bajó sacó de la parte de atrás un tercer el cual también era rubio pero era mucho más pequeño que el primero.

-¿Qué sucedió, Dean?- preguntó Castiel al que iba manejando.

-Emfrentamiento con fantasma. Nada muy grave, cariño-

"Dean" le dio una leve sonrisa a Castiel para luego girarse a Jack el cual estaba sorprendido y algo asustado de lo que pasaba a su alrededor.

-¿El nuevo?-

-Si, acaba de firmar el contrato hace un momento-

Dean se acercó a él con una cara de pocos amigos y Jack se encogió cerrando los ojos "Oh, no. Enserio me van a quitar los órganos..." Pero cuando esperó el golpe solo estendió su mano a él.

-Soy Dean Winchester y los dos que ves allí son mi hermano Sam y nuestro nuevo cliente, Gabriel algo. Es un gusto darte la bienvenida a la familia, niño-

Jack no sabía que responder a aquello, él solo quería un trabajo de medio tiempo con un salario decente.

Ahora lo único que quería era seguir vivo al final del día.