Takeru se sentó sobre su tatami y olisqueó. ¿Qué demonios es ese delicioso olor? Arrojando a un lado su manta, se puso de pie de un salto y salió corriendo de su habitación a la cocina.
Ryunosuke, recién salido de su trote matutino, ya estaba agachado afuera de la cocina, mirando por la puerta entreabierta. Cuando sintió a alguien detrás de él, se dio la vuelta. " Tono ", susurró. "No vas a creer esto. ¡Mako está cocinando!"
"Estás bromeando," susurró Takeru.
"Bueno, ella tiene un poco de ayuda allí. Compruébalo tú mismo".
Takeru echó un vistazo a la cocina y vio a Mako parada junto a la estufa con el delantal puesto. Le indicó a alguien detrás de ella que se acercara. "¿Me gusta esto?"
Ren miró por encima del hombro de Mako. "Sí, así. Ahora, rápidamente, transfiere el Spam a este plato. Bien". Se volvió y gritó: "¿Cómo está el arroz?"
La voz de Genta llamó: "Está casi listo".
Takeru parpadeó y se frotó los ojos para asegurarse de que no estaba viendo cosas. Miró a Ryunosuke. "Ve por Chiaki y Kotoha. Y date prisa; van a querer ver esto".
"Sí, Tono ". Ryunosuke se levantó a toda su altura y se dirigió a la habitación de Kotoha.
ooooo
Miu todavía estaba acostada sobre su tatami cuando escuchó un suave golpe en su puerta. "¿Quién es?" Preguntó adormilada.
"Miu. ¿Puedo entrar?"
El corazón de Miu comenzó a latir con fuerza. Se sentó y se frotó los ojos. " ¿Ani? "
"Sí, soy yo. ¿Necesitas un minuto? Puedo volver".
Miu se sentó y se llevó la manta a la barbilla. "No, está bien, entra". Hiroto abrió la puerta y entró en la habitación. Miu lo miró nerviosamente. "Buenos días, Ani ", dijo, tratando de no sonar asustada.
Hiroto se sentó junto a Miu en el suelo. "Buenos días, Miu". Al ver la expresión de la cara de Miu, sonrió cálidamente. "Relájate", dijo, extendiéndole los brazos. "No tienes nada de qué preocuparte."
Los ojos de Miu se llenaron de lágrimas, tanto por el miedo como por el alivio. " Ani ", rogó, "lo siento si te molesto, pero no puedo evitar lo que siento por Sousuke. Lo amo". Se aferró a Hiroto, dejando que sus lágrimas se derramaran sobre su camiseta negra.
"Shhh" Hiroto sostuvo a Miu suavemente, frotando su espalda. "No llores. Está bien. No estoy enojado contigo o con Sousuke. Está bien, mira. Sé que he sido muy duro con muchos de los tipos que han querido estar contigo en el pasado, y lamento haber sido un poco autoritario en ese sentido. Sabes que solo me preocupo por las personas que solo pueden estar interesadas en mí, y especialmente en ti, solo por quiénes somos o cuánto dinero tenemos. Supongo que nunca pensé que alguien como Sousuke entraría en escena ". Hiroto metió la mano en el bolsillo y sacó un paquete de pañuelos, que le entregó a Miu. "Es el primer chico que puedo recordar que no está preocupado por nuestro apellido o nuestra fortuna. Puedo decir que realmente se preocupa por ti , y no puedo discutir eso".
"Gracias, Ani ". Miu se secó los ojos.
"Todavía le patearé el trasero si te hace daño", dijo Hiroto con naturalidad.
"No tendrás que preocuparte por eso", dijo una voz desde fuera de la habitación. Hiroto y Miu miraron hacia la puerta para ver a Sousuke en el pasillo. "Buenos días, Miu. Hiroto".
