Lovely Boy ║ Bottom Yukhei ║

Voraz

Pareja: Lee Mark x Wong Yukhei
Tipo: Drabble
Advertencia: M-preg
Palabras: 488

________________________________

— Honey, ¿Que estás haciendo?

En medio de la oscuridad de la cocina vislumbró los grandes ojos de su esposo mientras se atragantaba una rara masa bañada en una salsa picante a la par de que tomaba un vaso de leche.

Los sonidos de mordiscos y sorbos cesaron dejando un sepulcral silencio en el que solo se notaban las respiraciones del contrario.

El menor suspiro con cansancio pasándose la mano por el rostro por la ya muy común escena.
Y es que desde que Lucas cumplió el quinto mes de embarazo, los antojos han hecho que arrase con la despensa y Mark no se perdona el hecho de que la Sandía que se compró para su cumpleaños la haya acabado en menos de una hora.

— Cass, si no me dices en este momento que estás haciendo voy a prender la luz y juro que me enojare si no encuentro la salsa picante en donde corresponde.

De inmediato, se escuchó el tintineo de varios frascos y tapas cerrándose hasta encontrarse de frente con su esposo, que con rapidez limpiaba con una servilleta su rostro y camisa de dormir en el que se notaba un gran bulto.

— Ah, hola Markie ¿que haces despierto a esta hora?

El pelinegro miró fijamente a su esposo con ojos interrogantes observando de arriba a abajo su apariencia.

— Wong Yukhei. ¿Que estabas haciendo?

El pelicastaño tragó nervioso evitando mirar los penetrantes ojos del padre de su hijo.

— Repito. Wong Yukhei. ¿Que estabas haciendo? —respondió en un tono más fuerte agarrando al embarazado de la cintura para que esté lo mirará a los ojos.

— Yo vine a tomar un vaso de leche, si, si, por un vaso de leche.

El más bajo agarró con un poco más de fuerza la cintura del embarazado para darle un profundo beso.
Lucas se sorprendió pero se dejó llevar por el ritmo de este, acariciando el cabello de su esposo disfrutando de la sensación de chocar sus bocas hasta que se separaron por falta de aire.

— Lucas, mi amor, ya me di cuenta de que te estabas comiendo la sandía, que compre está tarde, con salsa de ají y ese vaso de leche, tu boca sabe a todo eso. —susurró con dulzura abrazando con suavidad el cuerpo contrario que se encontraba tenso al ser descubierto en el acto— Deja de hacerlo, al día siguiente te pones a vomitar como loco y ya el doctor te menciono que evites las salsas.

— Perdón Markie, tu hijo me pone a comer de forma extraña con los antojos —suspiró recargandose en el hombro de Mark— ¿Podemos ir a dormir ya?

Dicho esto, Lucas se dirigió a su dormitorio para descansar un poco mientras Mark prendía la luz de la cocina para encontrar un completo desastre y suspirar.

—“Nota mental: No embarazar a Lucas de nuevo”—pensó agarrando un trapo e iniciando a limpiar.