Nonetheless

Febrero-Miércoles (El inicio del juego) -Capítulo XVI

Miércoles (El inicio del juego):

Edwin se quedó en esa esquina, hablando por horas hasta que el sol empezó a salir, ya eran casi las 5 de la mañana y Edwin no dejaba de hablar con su mamá, con la única persona que de verdad creyó en él todo el tiempo.

- Mamá: Edwin no sabes lo orgullosa que estoy, sabía que podías hacerlo.

- Edwin: Gracias ma, aunque créeme que esto solo está empezando, tengo planeado un montón de premios los años que este aquí.

- Mamá: Siempre tan orgulloso, deberías decírselo a tu padre, talvez él también se alegraría.

- Edwin: No menciones a ese viejo, para él yo ya no soy su hijo ¿lo olvidaste?

- Mamá: Eso no debe impedirte decirle lo que lograste.

- Edwin: Sabes que se burlara de mí, no te molestes.

- Mamá: Pero es un logro.

- Edwin: Ya te dije que no, podría jurar que solo me tuvo para seguir con su Imperio de dinero, que se quede con su fortuna, prefiero morir a tener su arrogancia.

- Mamá: Tu padre no es un mal hombre, solo hace lo que debe.

- Edwin: Eso dijiste cuando me interno en esa escuela, perdí toda mi infancia, nunca jugué en el parque con otros niños mamá, todo porque el quería que su hijo fuera alguien brillante y con sus ideales.

- Mamá: Si no fuera por eso no estarías donde estás, hay cosas que se sacrifican hijo.

- Edwin: Yo solo... Quisiera tener un padre de verdad, pero creo que ya no lo necesito, gracias por todo mamá, te llamaré luego, te amo.

- Mamá: Y yo a ti mi ricitos de oro.

- Edwin: ¿Dejaras de llamarme así?

- Mamá: No, lo haré en frente de mis nietos.

- Edwin: No te precipites.

- Mamá: Que tengas un buen día.

- Edwin: Así será.

Edwin corto la llamada, y suspiro, con cierto alivio pues sabía que su mamá estaba bien. La vida de Edwin nunca había sido fácil, pero ahora más que nunca, era el momento de que todos sepan quién era Edwin Ferani.

- Mientras tanto -

Acabo de despertar, Millie sigue dormida así que evitó moverme mucho al escribir esto, nos llegaron noticias de Marconi, por suerte no es nada que no sé pueda curar con medicinas y quimioterapia por un par de meses, pues el cáncer no es muy avanzado y Marconi acababa de despertar así que queríamos entrar a verlo. Desperté a Millie y junto a Rafael entramos en la habitación donde se encontraba.

- Marconi: Vaya, son mis fans.

- Rafael: Aun así, sigues con tus bromas, eres increíble.

- Marconi: Jaja... Perdón por preocuparlos chicos, enserio, debí decirlo antes.

- Yo: Lo que importa es que ahora estás bien.

- Marconi: Lo que a mí me importa ahora es que lo primero que veo al despertar eres tú junto a Millie, debe significar algo.

- Yo: Eres muy molestoso jaja.

- Millie: ¿Cómo se encuentra señor Marconi?

- Marconi: Mucho mejor que antes la verdad, espero que los otros chicos ya se hayan ido.

- Rafael: Sí, su bus partió hoy.

- Marconi: Me alegra, fue genial volver a juntar a la banda.