Entro a casa después de trabajar un sábado y veo a Adad en la sala.
- Hola Adad ¿qué haces? - pregunto mientras dejo mis cosas.
- Hola... – un pequeño momento de silencio se presenta - simplemente estoy aburrido y no sé qué hacer – dice el con una voz vacía.
- ¿No tienes tarea, cosas pendientes o cualquier otra cosa? – dije con curiosidad.
- No realmente, pero... tengo hambre – dice y suena su panza.
- ¿Por qué no has comido? ya es muy tarde – le digo mientras y reviso que hora es - ¡ya son las siete de la tarde! – dije fastidiado y decepcionado.
- ¡Vaya, ya llegaste ¡– dice Sara, saliendo de su cuarto.
- ¿Y tú, ya comiste Sara? – dijo manteniendo la calma.
- No, realmente no – dice relajada.
Suspiro y guardo la calma – bueno les haré de cenar, pero primero déjenme cambiarme – dijo y me voy al cuarto.
- ¿Qué quieres que nos prepare? – pregunta Sara.
- Lo que sea está bien... – dice Adad.
Salgo de la habitación y digo - Bueno les voy a preparar la cena solo esperen un momento -.
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Los cuatro juntos
HumorEn esta obra se presenta el pasado frustrante, el presente y el futuro soñador de los personajes junto a sus tonterías y momentos más felices