Tomo 1 Capítulo de Mei
Orestes
Cuentan las leyendas griegas que fue en la famosa Acrópolis que ocurrió la disputa entre la diosa Athena y Poseidón, el dios de los mares, por las tierras de Ática.
Athena había sido escogida por el pueblo como su protectora después de hacer nacer un olivo en una piedra, y en su homenaje los atenienses construyeron un enorme santuario de mármol, originalmente pintado en colores brillantes, en una roca de 800 metros de diámetro.
La Acrópolis, o "ciudad alta", se erige a una altura de 70 metros de la capital griega, y aun cuando ha sido desteñida por el tiempo y castigada por los siglos, sus construcciones continúan siendo admiradas y reconocidas hasta el día de hoy como una de las maravillas creadas por la humanidad.
***
Es de noche.
-Está haciendo menos calor ahora, ¿no?- los cabellos color lino de Shun se mueven con el viento en el teatro a cielo abierto.
Él hace el comentario en voz baja, volteándose para atrás y desviando su mirada del palco para observar la Acrópolis.
Es verano y el sol se oculta como si se colocara encima de Atenas. En esa época del año solo comienza a oscurecer después de las ocho de la noche, cuando un tono de azul profundo se esparce lentamente por la ciudad. Intensas luces doradas se encienden en la Acrópolis, iluminando las columnas del Partenón, los bajos relieves y cada detalle desfigurado por el tiempo.
-Señor Nicole, gracias por acompañarme.
-De nada.-dice Nicole, sonriendo.- Siempre es bueno venir al teatro.
Nicole está sentado al lado de Shun en la platea. Es un hombre elegante y simpático, a pesar de que su ropa, toda negra, parece un poco pesada para el verano del Mar Egeo. Con cabello castaño y una mirada tranquila, es lo que podemos llamar un verdadero intelectual.
-La verdad es que invité a Seiya... pero dijo que iba a morir de aburrimiento.
-Si trajeras a un chico como él a una pieza de teatro clásico sería arriesgar nuestro ingreso y que nos boten.
Shun sonríe y su rostro adolescente brilla con la luz reflejada por la piedra. A pesar de ser muy joven, no tiene el aire infantil de la mayoría de los muchachos de su edad. Los dos están sentados juntos en el punto más alto del auditorio.
-¿Qué sabes sobre el Odeón?-pregunta Nicole.
-No mucho.
-Fue construido en el 161 a.C., y este enorme teatro tiene capacidad para 6 mil espectadores y una acústica impresionante. Desde aquí se puede escuchar el sonido de una moneda cayendo en el escenario.-explicó Nicole.-También es llamado el Odeón de Herodes Atticus en homenaje al político romano que dio los recursos para su construcción. Fue reformado después de la Segunda Guerra Mundial y hoy recibe artistas de todo el mundo.
-Parece que el gusto de los griegos por el teatro es el mismo desde la antigüedad hasta los días de hoy.–comentó Shun.
-Aquí nosotros vamos al teatro como se va a un juego de fútbol. Piezas clásicas, como la de hoy, son generalmente presentadas en teatros a cielo abierto, sin correr mucho riesgo de cancelación por causa de lluvia... en Grecia cerca de trescientos días por año son soleados. Pero solo pueden comenzar cuando las luces se encienden, después de la puesta del sol, y por eso acaban bien tarde.
-Este espectáculo tiene cinco horas de duración...
-¡La noche va a ser larga!-dijo Nicole, sonriendo.-Todos los griegos, incluso los niños, duermen muy, muy tarde.
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Gigantomaquia
Short StoryEsta historia fue escrita por Tatsuya Hamasaki, y trabajada en conjunto con Masami Kurumada como consejero y compilador. Fue publicada por Shūeisha en la colección Jump Books, editada en Japón el 23 de agosto de 2002. Está formada por dos volúmenes...