Para Caperucita

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No voy a engañarte con mi disfraz de abuelita. No voy a decirte que te acerques otra vez, para poder darte besos, por traer comida a tu abuela.
Yo, y solo yo, soy el lobo. Ese lobo, distinto, que lo único que quiere es estar cerca de tí, Caperucita roja.
Lo único que quiero es que tú me quieras como yo te quiero a tí...

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