PRÓLOGO.

383 18 10
                                    

Corro lo más rápido que puedo, ni siquiera miro hacía atrás. Todo mi cuerpo está alerta y mi corazón late como nunca lo ha hecho en mi vida, levanto la mirada encontrándome con la luna roja demasiado potente en el cielo nocturno, todo estaba mal y demasiado perdido.

Escucho el sonido de las espadas chocar y de los cuerpos caer en suelo, algunos chillidos me afirman que los lobos están siendo atacados pero todo es una mezcla entre gritos junto a mis jadeos de cansancio por correr a un destino incierto.

- Sesshomaru. - digo al verlo frente de mí, su piel blanca tiene ciertos moretones pero nada grave, sin embargo, en su estomago sobresale una gran mancha roja, su sangre salía en abundancia.

- ¡cuidado! - me grita con preocupación y al voltear observo al cazador con la marca en su mano, era mi padre, era él quien tenía un arma extraña y corría hacía nosotros con determinación.

Cerré mis ojos y solo escuche el filo del arma mientras un grito desgarrador lo seguía.


Desperté de golpe con la respiración agitada, me pongo la mano en mi pecho ya que no me gustaba tener esa pesadilla, últimamente se estaba haciendo habitual tenerla cada noche              - ¿estás bien Rin? - dice Hakudoshi levantándose de su cama.

- solo fue una pesadilla.

- ¿la pesadilla inconclusa?

- así es. - digo pensativa mientras veo la ventana.



HASTA PRONTO.Where stories live. Discover now