Un día, Miedoso, conoció a una chica que se llamaba Ana pero todo el mundo la llamaba Anie y fue lo que se dice amor a primera vista. En el comedor le dijo:
¿Quieres comer conmigo, Ana?
No. — le contesto ella.
Pero ante este "NO", Miedoso no se dio por vencido porque como ya hemos dicho estaba enamorado de ella.
Todos los días antes de ir a la escuela iba a su casa y le preguntaba si quería ir con él.
Anie siempre contestaba lo mismo: No, cuando te duches, quizá cambie de idea.
El pobre Miedoso se dio cuenta de que nunca iba a conseguir nada si no se limpiaba.
Cuando llegó a casa les dijo a sus padres que se iba a meter en la ducha.
Los padres, claro, pensaron que era una broma y siguieron a lo suyo. Mientras tanto, en la ducha, del cuerpo de Miedoso salía más suciedad que de un vertedero.
Cuando terminó de ducharse y sus padres le vieron mojado, se alegraron muchísimo y fueron a abrazarle por primera vez desde hacía años.
Al día siguiente en el colegio, Miedoso fue acogido por todo el mundo.
En ese momento, Anie se acercó y le plantó un beso.
Y Colorín Colorado este cuento se ha acabado.
YOU ARE READING
Miedoso
FantasyUn niño no quiere bañarse y lleva mucho tiempo sin ducharse hasta que...