Nagito: ¡¿Te metiste en una pelea con matones?!
Monaca: -de trece- Si...
Nagito: ¡¿Y tu por qué no la detuviste?! -abrazando a su retoño-
Izuru: En mi defensa, le dije que parara con los golpes...
Unas horas antes...
Izuru: ¡Monaca, deja de golpearlos!
Izuru: ¡Patealos y ahorcalos! Eso es mejor.