Ib Garry y Mary |Solos los tres| [Ib] |ONESHOT|

7.- Nuevas amistades y una ¡Sorpresa!

—¡Ten un lindo primer día cielo!— grito el pelimorado a su rubia mientras está entraba en la escuela.

—¡E-está bien papá! ¡pero no lo digas en voz alta que me avergüenzas!— susurro fuerte la niña al darse vuelta.

Garry le contestó con una sonrisa, al mismo tiempo en que agitaba la mano despidiéndose de la pequeña.

-En la escuela de Mary-

—Oh vaya, pero si es la nueva— dijo la líder de un grupo de chicas al acercarse a la rubia, en el recreo.

—¡¡Hola!!— respondió Mary con una sonrisa de oreja a oreja— un gusto en conocerlas— ella ofreció su mano con amabilidad. En ese instante la líder golpeó la mano de la rubia apartándola.

—Apártate de nosotros rara, no somos tus amigas y mas vale que te cuides porque aquí mandamos nosotras— dijo, para luego, levantar a la rubia sosteniéndola del uniforme.

—¡¡Ey!! ¡Basta!— respondió una niña de cabello pelirrojo y pecas.

—¿Porque deberíamos hacerte caso Lila?— se cuestionaron mientras acorralaban a la pelirroja.

—¿Porque? Porque... ¡¡¡MAESTRAS!!! ¡¡¡UN VIEJO DECRÉPITO QUIERE TOCARME!!!

—¿A-acabas de llamarnos "viejo decrépito"?

—¡Si! ahora váyanse antes de que las maestras vengan y las castiguen.

—¿Esta vez te saliste con la tuya, pero no quedará así, oíste niña nueva? ¡Ah! y Lila, cuida tus espaldas— respondió la líder al alejarse.

Pocos segundos después tanto maestras como maestros acudieron al llamado de la niña. Luego de explicarles la situación los profesores volvieron a lo suyo, sin antes agradecerle a la niña pues aunque mintiera, una pelea era igual de importante y se tenían que hacer responsables.

—¡Bien! No tuve tiempo de presentarme adecuadamente niña, me llamo Lila y si lo se, mi nombre no tiene nada que ver con mi cabello así que no lo menciones que se que lo estabas pensando.

—No, no, para nada yo solo...— Mary hizo una pausa y se quedó observando hacia sus zapatos— Muchas gracias.

—¡No hay de qué!— respondió luego de observarla confundida.

—Y, tú, cómo te llamas?— pregunto la pelirroja.

—¡Mary!, ¡un gusto en conocerte!— sonrió.

—¡Oh! tu nombre me recuerda a algo— dijo la pecosa— ¡na! quizás me habré confundido, un gusto Mary.

Mary se sentía emocionada pues había conocido a una nueva amiga, la cual no le hacia sentirse sola en una escuela tan grande, al menos desde su perspectiva. Nuevos amigos y nuevas aventuras, fue lo que pensó nuestra pequeña rubia.

—¿Eres nueva verdad?, ¡deja que te dé un paseo de bienvenida a nuestra maravillosa escuela!— dijo para luego tomar un palito que se encontraba por ahí y usarlo de bastón.

Acompañada de su bastón la nueva amiga le mostró a Mary los lugares más recónditos, visitados y ocultos que se le podía ocurrir.

—¡Esta es la cafetería!

—¿De verdad tienen una cafetería en una primaria?

—¡Mirela con sus propios ojos señorita Mary!