୧ ׅ𖥔 ۫ ◜❣️◞ 𝑨𝑵𝑮𝑬𝑳 𝑶𝑭 𝑫𝑬𝑨𝑻𝑯 𓂅 ❴ᴍɪʟxɪᴇ❵ . ࣪ ˖﹆

˗ˋˏ❱ Única parte

Ella estaba en peligro, lo presintió al ver unas luces por la ventana de ese sitio.

Segundos después de que pudiera librarse de esos niños maníacos no tuvo otra cosa en mente más que ir por Millie. Atravesaba ese oscuro bosque bajo la noche, con velocidad.

Tenía a la mano una escopeta, nunca se sabía cuando podían arremeter contra él.

A cada paso que daba, iba pensando en aquella imp que hacía que el infierno fuera más radiante. Era, tal vez, su motivo más importante para sonreír, su compañera en el crimen o la travesura, su defensora empedernida, su apoyo, su calma.

La de cabellos oscuros no solía ser una damisela en apuros, cada uno podía defenderse y atacar a base de armas o fuerza bruta, pero en esta ocasión lograron atajarla.

"Hijos de perra".

Emitió un sollozo bajito. No, no podía dejar que el pánico se llevara sus sentidos otra vez, ¡por su culpa esos estúpidos se habían escapado! Y una lágrima había salido, agua salada producto de la angustia al no saber qué pasaba más allá.

Cuidaba de no hacer ruido, si no era lo suficientemente listo, pasaría de ser un cazador a una presa. No estaba en sus planes volver a caer y dejar que esas bolsas de carne le hicieran algo a su bella mujer.

Su adoración, la que le arrancaba suspiros, a la que le podría dedicar mil y un serenatas y con la que podría atravesar el infierno entero sin cansarse.

Fue recordando lo que Millie le mencionó horas antes, en su práctica de puntería.

—Los humanos están llenos de secretos desagradables.

Culpables e inocentes, no son nuestro negocio Moxx.

Matar por lo que nos pagaron es nuestro negocio...

Divisó a la maldita que lo había trucado con su fachada de inocente... Apuntándole a Millie y a Blitzo, ellos estaban atados en unas astas y la rubia reía con sorna por su desdicha, qué asco.

"A la mierda, voy a acabar con esto".

Levantó su escopeta, estabilizó ambas manos, con frialdad y decisión apuntó hacia la humana, justo a su ojo derecho.

—... Escoge un objetivo.

Disparó, no bajó la guardia hasta verla caer. Se fue desangrando poco a poco mientras el otro idiota había escapado.

—¡Moxxie!
—No te voy a dar tu maldito cheque por esto.

Exclamó Millie seguida de Blitzo, los desató con rapidez. El de pecas la abrazó, ambos juntaron sus frentes aliviados de tener consigo a su otra mitad. El fuego que tenían detrás no se comparaba con el que sentían muy dentro suyo, un calor que ha subsistido por meses al estar en un mismo plano existencial y que los ha hecho merecedores de poseer a un cónyuge que les atrajo al primer momento de cruzar miradas.

—Oh sí, ¡estoy bien!— Exclamó su superior en el piso, Moxxie se apresuró a auxiliarlo y luego de una amenaza silenciosa se alejaron, dispuestos a irse a su hogar.

Pero el de mechas blancas se regresó a la casa de los enemigos para hacerlos reflexionar por sus horrorosas acciones. No pensó que unos niños humanos pudieran ser tan aficionados a la matanza. Al salir se detuvo un instante antes de entrar al portal para asimilar esa travesía que habían experimentado.

Millie le habló, acariciándole levemente la mejilla.

—Lo estás haciendo bien, dulzura.

—Mejor ahora, cariño. Sólo necesito algo de tiempo para procesarlo.

—Tienes un corazón tan dulce...— Lo besó, y él tenía ese brillo en los ojos que solamente Millie podía provocarle. Una proeza encantadora, como el día en que se casaron.

"Ella es mi reina, es como un sueño."

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Algo muy corto que venía planeando por mucho tiempo. Anteriormente, tenía otra trama pero, al salir el primer episodio en halloween aproveché y lo cambié.

Gracias por leer uvu.