SOY TUYO

"Nos poseemos el uno al otro"

Este es el último capítulo 

💜Disfruten💜

Dave abrió los ojos y parpadeó infinitamente tratando de adaptarse a la luz entrometida en su habitación a través de la ventana.
"Bien. Estás despierto", escuchó una voz que había temido escuchar. - 

"¿Realmente te presioné tanto como para que te quitaras la vida?"

Dave solo miró al hombre antes de formar palabras para responder. -"lo siento."

"Jódete Dave", gritó. - "siempre tomas el camino fácil. Siempre me haces sentir como el villano".

Las lágrimas rodaban por sus mejillas. - "si mi hijo no hubiera sido traído aquí, estoy seguro de que no habría sabido que estabas aquí. ¿Por qué me torturas así? ¿Me lo merezco? La primera vez me negaste enfrente de todos y dejaste en claro que estaba loco. ¿Ahora quieres morir y dejarme suicidandote? "

Ambos hombres ahora estaban llorando. Keith se levantó de su silla y caminó hacia la cama. Se sentó al borde de la cama y agarró a Dave por la nuca, apretando los labios con lujuria y deseo mutuo.

"No me mates dos veces", rogó Keith mientras jadeaba con fuerza. - "lamento haber sacado todas mis frustraciones contigo. ¿Todavía te duele?", preguntó pasando las manos por la espalda donde lo había azotado sin piedad.

"Un poco", respondió Dave.

Keith envolvió sus manos alrededor del cuerpo de Dave y tiró de él para que se sentara en su regazo. Deslizó la prenda del hospital y le acarició la espalda mientras pasaba la lengua en el hombro.

"¿Puedo hacerte el amor?"

En lugar de responder, Dave envolvió sus brazos en su cuello y estrelló sus labios en un beso intenso. Gimiendo en el beso mientras se acomodaba en el regazo de Keith. -"quiero sentirte." Y eso fue suficiente para que la lujuria de  Keith despertara sobre el cuerpo enrollado a él.

Todo esto mientras Arthit se asomaba por la ventana de cristal. Ahora entendía la mitad de la verdad de su padre. La otra verdad que lo hizo casi sollozar fue que Kongpob fue llevado al mismo hospital.

Fue a la recepcionista para preguntar sobre la habitación en la que estaba confinado Kongpob. Al principio, la enfermera se mostró reacia a dar la información, pero después de una persuasión sincera, finalmente estuvo de acuerdo.

Arthit caminó lentamente hacia la habitación. No sabía qué decir o hacer una vez que este frente a Kongpob.
Cuando se acercó a la puerta, vio a dos hombres vigilando y también a Aim.

Los hombres reconocieron a Arthit y se inclinaron ante él. Aim lo miro de la cabeza a los pies antes de caminar unos pasos hacia él.
"¿Puedo ayudarte?"

"Umm ... yo ... quiero verlo", se sobresaltó. La mirada mortal de Aim era un poco intimidante.

"No. No quiere verte. Eres una maldición y te sugiero que te vayas de aquí ahora".

Arthit se acercó a Aim y trató de sostener su mano. "Por favor, solo quiero verlo".

"Solo un segundo y vete".

Arthit sonrió y caminó hacia la puerta. Dudó en girar el pomo temiendo lo que pudiera ver.
"Está dormido, puedes entrar", le dijo Aim.

Giró el pomo de la puerta y entró. Las lágrimas comenzaron a fluir al ver las tuberías conectadas en el cuerpo del hombre. Se sentó al borde de la cama y le acarició la cara.