Parte 3

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Al terminar mi turno salí de la cafetería a encontrarme con Scott, el frió viento choco contra mi cuerpo ni bien salí, cada vello de mi cuerpo se erizo ante el acto, temblé un poco y me abrace a mi misma para conseguir calor, me maldije por no traer un bendito suéter. Llegue hasta el centro comercial en donde quede de verme con Scott, mi cabello era un desastre por el viento así que lo arregle antes de entrar.

-La belleza de todos los rosales del mundo jamas se compararían a tu belleza.- dijo Scott al verme, era raro porque antes el ni se fijaba en mi existencia, me conocía solo por ser amiga de Ryan y Bella.

-Gracias- dije con una sonrisa y me senté frente a el, no me sentía incomoda porque me mirara fijamente, me sentí incomoda cuando vi al mismo grupo de mi trabajo mirándonos atentamente, ¿me habían seguido? No, no creo, debería ser solo coincidencia.

-¿Que tanto ves, pequeña?- musito Scott mirando hacia la dirección en que yo tenia la vista puesta- ¿Los conoces?- pregunto girándose para nuevamente  verme.

-No, solo es un grupo que atendí en mi trabajo, solo se me hizo raro verlos aquí, nada mas- dije agachando mi cabeza, era una maldita costumbre agachar mi cabeza.

-Como sabes que soy el capitán del equipo de la universidad, ademas de ser el delegado principal, tengo cierta información- dijo mirándome con suficiencia.

-¿Yyy?- pregunte sin entender a que quería llegar.

-Y que ese grupo de ahí se esta transfiriendo a nuestra universidad, al ultimo año, tienen buenas notas, no tanto como las mía pero son  buenas- dijo con una sonrisa.  Scott no parecía un chico presumido, en cierto punto las veces que lo observe haciendo mi "investigación personal" que se basa en fijarme en todos sus movimientos para poder definir lo un poco, osea estudiarlo, nunca lo he visto ser vanaglorioso de si mismo, o ser extremadamente presumido en aspectos que van mas allá de sus notas.

-¿Quieres comer algo?- me pregunto el chico sacándome de mi pequeño trance, asentí, suerte que traje mi propio dinero para pagar mi cuenta. Scott fue a encargar nuestros pedidos ya que aquí no hay meseros ni nada por el estilo, uno tenia que ir a encargar su pedido y esperar a que este listo, si porquería ¿no?. Desde que mi acompañante fue a encargar los pedidos sentí mas pesada la mirada del grupo, los mire de reojo y confirme que seguían viéndome, uno en especial me miraba de una forma que quería comerme viva, era el de ojos grises,  la chica me miraba como si tratara de decirme sal de ahí  o algo así, los otros miraban a Scott con cierto odio y frialdad, ¿que estaba pasando? No lo se, sin embargo algo en ellos me es tan familiar, aparte mi vista de ellos y vi a mi acompañante acercarse con nuestros pedidos.

-Hamburguesas y papas para la bella dama- dijo cantarin y fuerte entregándome mis pedidos, le sonreí y vi que el odio hacia Scott aumento en ese momento para el grupo.- Valla esta situación si que es rara- pensé, me dispuse a ya no prestarles atención, puesto a que tal vez mi mente me este jugando una mala pasada.  

No puedo negar que la tarde junto a Scott fue de verdad grandiosa, hablamos de todo y nada a la vez, la tarde se paso rápido entre charla y charla que apenas nos dimos cuenta de que ya eran casi las 23:30 p.m, Scott se ofreció a llevarme pero me negué puesto a dicho que tenia cosas que hacer ademas de que pago la cuenta, no insistió si a cambio yo aceptaba salir nuevamente con el, lo cual acepte con gusto, no niego. Antes de salir me dirigí al baño del centro comercial, a lavarme la cara, cuando estaba por salir vi a la pelirroja entrar, la vi un segundo y luego me dispuse a seguir mi camino hasta que..

-¡Espera!- dijo la chica, me quede estática ante sus palabras, pero aun así voltee a verla.

-¿Que sucede?- pregunte viéndola directamente.

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⏰ Última actualización: May 18, 2020 ⏰

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