¿Fuimos amigas alguna vez?

Parte 6 Instagram

Narra Angie

Fue una muy buena fiesta la de anoche. Después del episodio del pico, nos seguimos divirtiendo y riendo, hasta que a esta chica, Brisa, la pasaron a buscar. Que noche... que chica. Nunca me he privado de sentir una atracción por alguien, sea hombre o mujer, para mi las etiquetas son una soga que amarra a las personas a una estructura social. Lo había pasado tan bien con ella, la encontraba bellísima, eso era innegable. Había olvidado pedirle su Instagram, afortunadamente sabía cual era su canal de youtube, gracias a Demente. 

Me levanté del sofá donde estaba durmiendo en la casa de Demente, fui a buscar mi celular que estaba cargando en el enchufe ubicado al lado de la televisión. El departamento era pequeño, pero acogedor. Demente y Pedro estaban durmiendo juntos en la cama de dos plazas en la única habitación que había. 

Me metí a youtube. Bri Dominguez. Busqué sus redes que siempre solemos poner en las descripciones de los videos. Ingresé a Instagram con el link, le di automáticamente seguir y empecé a mirar su perfil. Esta chica tenía alto estilo. Estuve durante 20 minutos seguidos mirando sus fotos, viendo su estilo, su descripciones. Como esta chica ya me seguía no iba a recibir alguna notificación de vuelta, por lo que me animé a hablarle y mandarle un dm. 

-Ey, buena fiesta no?- Le puse y lo envié al instante sin pensar. ¿En serio Angelina? Que boluda, como no se me ocurrió mandarle algo más interesante, fracasando hasta en mensajes, ni eso podía hacer bien. Tiré el celular al sillón de la vergüenza. 

-Buen día, tempranuli- dijo Demente saliendo de la habitación, mientras se rascaba los ojos y se estiraba.

-Buen día, sí, la verdad me despertó el hambre, podríamos pedir para desayunar, o más bien almorzar, ya son casi las 2 de la tarde- le dije.

-Bueno, ¿qué querés de comer?- me dijo aún despabilando. 

-Hamburguesa. Vegana. Con coca-cola- le dije, muy segura de lo que quería.

-Che, vos no varias mucho. Vale, yo lo pido- dijo, agarrando su celular y marcando para pedir. 

Me di vuelta hacia el sillón, tomé el celular pero todavía no tenía ninguna notificación. No había nada que me pusiera tan nerviosa como que se demoraran en responder los mensajes, igual todo bien, entiendo que la gente tiene vida fuera de la tecnología, aparte solo habían pasado 5 minutos. 

-Listo, en 20 llega- dijo Demente bostezando- Voy a despertar a este vagonetas- y entró a la pieza para despertar a Pedro.

Me quedé en el sillón mientras miraba Instagram y hacía una historia para contar que anoche lo había pasado muy bien en la fiesta. Quizás indirectamente lo hice para que Brisa la viera y comentara,  ya que ella ya me seguía de antes. 

Seguí sumergida en esta red social, hasta que sonó el timbre, Demente fue y abrió para recibir la comida.

-Al fin- dije saltando del sillón y yendo a la mesa estilo americana de la cocina. 

-Eh, pareciera como si no te alimentaras en años, calmáte- dijo demente. En eso llega Pedro y se incorpora junto con nosotros, aún seguía muy dormido, casi en estado zombi. 

Comimos, casi en silencio, con algunos comentarios de Demente que siempre nos hacía reír. Luego de terminar, fuimos los tres a sentarnos en el sillón, ya que habíamos comido muy rápido. Tomé mi celular antes de sentarme. Ahí estaba la tan esperada notificación.

"-Si jajaja alta fiesta. ¿Mucho sueño?- " había respondido Brisa.