El resto de la semana fue tranquila, Matthew y yo solamente nos hablamos lo estrictamente necesario, a veces él quería mis apuntes o yo los suyos, de vez en cuando me hacía un comentario gracioso, pero eso fue todo, para el final de la semana quedamos simplemente como compañeros. Por el lado bueno, hice 4 amigas, sus nombres son Abby, Ivy, Margot y Paige, todas vamos juntas en una clase y conectamos casi al instante, ahora mismo me estoy arreglando en mi habitación para tener nuestra primera salida oficial como amigas.
Yo nunca he sido una persona que tenga muchos amigos, en casa tengo un mejor amigo y una mejor amiga, Jackson y Tori, ambos se quedaron en Minnesota y los extraño mucho, aunque hablamos por teléfono o nos enviamos mensajes todos los días, siento un gran vacío al no tenerlos a mi lado; los 3 hemos estado juntos desde séptimo grado y hemos sido inseparables desde entonces, creo que ellos son las personas que mejor me conocen, tal vez incluso mejor que yo misma.
—Hey, Alessandra, tenemos que irnos o llegaremos tarde—grita Abby desde la sala, interrumpiendo mis pensamientos—No quiero perderme esta fiesta.
—Ya voy.
Invité a Abby a que se arreglará conmigo, pero ella no es una chica normal, en menos de 2 horas, ya estaba lista, yo sigo tratando de subir el cierre de mi minifalda ajustada, la cual tal vez es demasiado ajustada para mi gusto. Cuando gano la batalla, la combino con una blusa negra sencilla de la misma tela y una chaqueta que le da más estilo al outfit; le hice rizos a mi cabello, me maquillé lo mejor que pude y me puse mis mejores tacones. Ahora sí, estoy lista y me siento genial.
—Ya era hora—me reclama mi amiga en el momento en que salgo de mi habitación—¿Estas segura de que tus roomies no quieren venir?
—Sí, ya les pregunté—respondo, mientras tomo las llaves del flat y vamos a la puerta—Dana salió a cenar con su hermana menor y Lucy está en casa de un "amigo" suyo.
—Y por amigo te refiere a que...
—Sip, al menos alguien en este departamento consigue algo de acción.
—Jaja, no inventes, tenemos que poner un remedio a eso.
—¿Cómo?
—Haré que jales al éxito.
—De nuevo ¿Cómo?
—Vamos, no puede ser tan difícil conseguir a algo con quien hacerlo en una fiesta.
—Pero no quiero hacerlo con nadie.
Abby se me queda mirando fijamente y me toma del hombro:
—Alessadra ¿Eres virgen?
Mierda, pero si quiero que en verdad seamos amigas, debo decirle la verdad.
—Sí, lo soy.
—¿Por qué? En estos tiempos ya nadie es virgen.
—Simplemente no he conocido a una persona con quien quiera hacerlo. Bueno si, una vez, pero no ocurrió nada.
—¿Qué pasó?
—Resulta que él no estaba tan interesado en mí como yo creía.
—Pobre de ti.
—Esta bien, él nunca se enteró de que a mi me atraía.
—Los hombres nunca saben cuando una chica quiere con ellos.
—Dimelo a mí.
—Y ¿qué pasó con el chico que no te hizo caso?
—Un día con más calma te explico, ahora vámonos que tenemos que llegar a esa fiesta.
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YOU, ME AND THE ROOMMATE
Teen FictionBASADA EN UNA HISTORIA REAL. NUEVO CAPÍTULO TODOS LOS VIERNES. Alessandra con el objetivo de alejarse de su pasado, inicia su primer año de Universidad en Stanford, donde conoce a Matt, un chico que pondrá su vida de cabeza, entre ellos habrá una am...