Mi arepita, mi taquito|| ✔️ [EDITANDO]

003. Pockys

Como siempre Japon de inventor le gusta shippear a la gente, asi que decidio unirlos con el Pockys.

El pockys es un juego donde dos personas tienen que ponerse un palito de chocolate en la boca, uno con cada extremo e ir comiendolo hasta que se acabe y los dos se besen.

Fue uno de los primeros en enterarse de la atracción que el venezolano sentía hacia el norteamericano amante de los tacos, y tenía sospechas de que a esta también le gustara el veneco. Por lo que su plan consistía en hacerlos jugar a ambos para que se besaran.

Pero ademas de ser un furro shipeador, es inteligente así que invito a jugar a otros countrys por si al caso no sospecharan.

—Muy bien. México, Argentina, Chile, Venezuela, Colombia, Brasil; ya saben la temática. Sacaré un dos papelitos y los nombres que toquen tendrán que jugar —explicó superficialmente. Claramente nadie sospechaba que Japón tuviera todo calculado para que  su plan saliera a la perfección.

—Ok, Primero van... ¡Colombia y Brasil!

Y asi empezo el juego. No tomó mucho tiempo hasta que los dos últimos países tomaran su turno.

—Aquí tienen

—Mente de Venezuela: Coño marico tengo miedo. El bicho me gusta y todo pero ajá, no pensé que mi primer beso con él fuese así.

El juego comenzó con dos latinos con los nervios a mil, los segundos pasaron relativamente lento para el par de jugadores. Y todo iba según lo planeado hasta que tuvo que llegar el chileno a romper el pequeño trozo de chocolate que separaba a las dos ex-colonias.

—NoOooo, andatei pa ya enano qliao que el mexicano este seguirá siendo virgen hasta que este mayorsito —Chile había abrazado a México adoptando cierta ¿protección sobre él? No sabría si llamarle así, más bien estaba sonando estúpido.

Todos lo miraron confundidos.
Japón se notó un poco decepcionado y se preguntó si Venezuela se estuviese sintiendo igual que él.

10 minutos despues

—Vene, lamento que no haya funcionado ¿Estás bien? —preguntó cuando ya sólo quedaban ambos.

—Claro menol, no te preocupes por eso. Al fin y al cabo, no estaba preparado.