"Dulce bienvenida"

CAPÍTULO I

Konnichiwa! Gracias a los momentos entre Sasuke y Sakura del episodio 136, decidí hacer esta pequeña historia, conteniendo todo aquellos que los Sasusaku nos imaginamos que pasó, luego de su interacción en el regreso de Sasuke a su hogar junto a Sakura. Fue hermoso y lo amé, por tal tazón, quiero compartirlo contigo. Está dividido en 2 partes, espero te guste y lo apoyes. (◕‿◕✿)

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-I-

Sasuke caminaba rumbo a su casa, estaba ansioso por ver a Sakura, la extrañaba demasiado y eso que solo fue un cambio de época, pero haberle mentido a la niña, quedando como un tonto pervertido, aún le molestaba. Suspiró y se dispuso a abrir la puerta, solo quería ver a su esposa y sentir su calor, porque por la hora ella debería estar durmiendo.

Guardó su llave en el bolsillo y justo cuando llegó al comedor se sorprendió al ver ese rostro angelical, era Sakura su amada esposa. Su corazón empezó a latir fuertemente, ella dormía recostada sobre la mesa y solo de pensar que lo estaba esperando un fuego en su interior ardía.

Se sintió el hombre más afortunado al ser esposo de una grandiosa y fuerte mujer. Su rostro reflejaba esa felicidad y con ternura siguió contemplándola, de pronto vio como se movió, porque al parecer se percató de su presencia. Inmediatamente al verlo le dedicó una hermosa sonrisa.

-Bienvenido querido.-

-¿Me estabas esperando?-

-Sí, ya que también regresé hace poco, porque estuvimos en alerta, pero ya se retiró la alarma ¿verdad?-

-Sí- Sasuke veía detenidamente cada movimiento de su esposa, ella siempre estaba dándole su apoyo y él se sentía tan feliz, pero se lamentaba por no estar todo el tiempo a su lado, sin embargo, agradecía que cada vez que regresaba disfrutaba de estar con ella. Lo que le había dicho a Naruto recién era verdad, regresaría más a menudo a su hogar, porque cada vez era más difícil alejarse, eso sí, se percató que inconscientemente la buscaba justo en la noche. Ella le sacó de sus pensamientos otra vez.

-Sarada se durmió hace poco, debes tener hambre, descuida, ya te preparo algo.- Sakura pasó a su lado y fue inevitable sentirse más culpable de no poder estar con ella todo el tiempo, por lo tanto, sintió que tenía que decirle algo o su corazón no lo resistiría.

-Sakura lo siento.-

-¿Por qué lo dices de repente? Tú no debes preocuparte por nosotras, estamos bien, porque tu misión es cuidar de todos nosotros.- Sakura le brindó otra de sus sonrisas cálidas que lo confortaban.

-Sí- Así le devolvió esa hermosa sonrisa, que bien se sentía solo con verla.

-Lo ves tú nos cuidarás siempre, así que no te disculpes más, yo se por todo lo que has pasado y me haces muy feliz porque confías es mí. Sarada lo sabe, pero se hace la difícil, ya verás que algún día te lo dirá.-

-Gracias Sakura- Sasuke se acercó a su esposa y tras tomar su mano se dirigieron a la cocina.

-Ponte cómodo mientras cocino y luego me cuentas tus aventuras, mientras comemos.-

-Está bien.-

Sasuke subió a su habitación y se quitó el abrigó, lo colgó y se percató del aroma que inundaba el lugar, era recordar sus primeros días de casados. Una sonrisa adornó su bello rostro, Sakura le brindaba tanta felicidad, que se sentía en un espacio hermoso a su lado. Se apresuró a bajar para no hacerla esperar y fue cuando la vio nuevamente frente a la mesa terminando de servir, mientras tarareaba una canción. Poco a poco se acercó por detrás y deslizó su mano por su cintura, al mismo tiempo que hundía su cabeza en su hombro y suspiraba.