La brisa de invierno recorrÃÂa por todo mi cuerpo ,dándome escalofrÃÂos, no me importaba , nada me iba a importar cuando me fuera.La pulsación se hacia más fuerte  y la respiración era cada vez mas acelerada , sentÃÂa como las piernas se entumecÃÂan y unas ganas de detenerme se trasmitÃÂan a travez de toda mi articulación , mi cerebro habÃÂa dejado de manejar mi cuerpo y mis pies se movÃÂan por acto propio. Atrás dejaba las voces , podÃÂa ser que ya los hubiera dejado muy atrás pero no me iba a arriesgar.
Segui por mas minutos pero de pronto iba perdiendo la rapidez y mi cuerpo se agitaba como en convulsiones. Divisé un callejón y me arrastré hacia poniéndome en lado más oscuro, detrás de un contenedor de basura , me puse en posición fetal y me quede quieta.
¿Dondé esta la chica?- dijo una voz profunda llena de odio y frialdad ¿Cómo era posible que me haya enamorado del dueño de esa voz?. El temblor se adueño de mi y me mordàel labio tratando de quedarme callada y no gritar, una hilera de sangre bajaba por la herida de forma lenta.
No la hemos encontrado aún â respondió una segunda , esta era grave pero estaba temerosa.
¡Maldición , maldición! â gritó la primera voz y se escucho el sonido de algo metalico golpeándose.Una vibración recorrió mi cuerpo , deje de temblar y hasta contuve la respiració, el algo metalico que habÃÂa pateado era el contenedor de basura.
Ya la encontraremos â dijo la segunda voz tratando de calmar al primer chico.
¡¿Cariiiñoo , donde estas?! â gritó divertido-psicoticamente â ¡Es mejor que no trates de esconderte , muñeca! ¡YO SI-EM-PRE VOY A ESTAR UN PASO DELANTE DE TODOS!
Se escucharon pasos cada vez más cercanos a mi. Y yo , yo temblaba sentÃÂa como el corazón se me detenia y la respiración también , rezé a Dios tal vez el era el único que me escuchara pero no ocurriaâ€Â¦nada , no les partió un rayo a los dos chicos , cuando mis esperanzas estaban cada vez más perdidas se escucharon unas sirenas fue cuando el se detuvo y los pasos se alejaron.
Escuché las últimas maldiciones y después el motor de los dos carros y como se alejaban.
Parecia que todo el alivio volviera a mi, sentÃÂa que el corazón seguÃÂa pulsando y la respiración volvia a mi. Pero no duro tanto, cai rendida al suelo. Noches y dÃÂas sin poder dormir pero ahora …ahora estaba libre.
Miré al cielo y ahàse encontraban varias estrellas , tal vez estaban viendo la libertad de una chica con felicidad.
Respiré hondo.
Era libre.
Sonreàtristemente a las estrellas , tal vez no miraban la libertad de una joven y estaban mirando el ascenso de una nueva estrella.
Apreté los ojos y una lagrima bajo lentamente  por mi mejilla terminando en mis labios con un sabor salado.
Deje de apreter los ojos y de sollozar ,  y me deje envolver en un profundo sueño.
Tal véz todo solo habÃÂa sido una pesadilla  y ya tenia que terminar.
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Mi pedazo de cielo
Teen Fiction“ Cuando te conocí tuve miedo de abrazarte, cuando te abracé tuve miedo de besarte, cuando te besé tuve miedo de quererte y ahora que te quiero tengo miedo de perderte. ” -Maryssa Strydhood