—Atención, señores pasajeros, les informamos que todos los vuelos han sido cancelados debido a la tormenta de nieve que acaba de desatarse en la ciudad de Nueva York. A su vez les informamos que los servicios de taxi, autobús, Uber y otros medios de transporte, han suspendido sus servicios también. Por lo que deberán permanecer aquí dentro para mayor seguridad. Les rogamos sepan disculpar las molestias ocasionadas y ante cualquier duda, pueden acercarse al personal de su aerolínea correspondiente para recibir un informe más detallado. Muchas gracias.
El rostro de Park Jimin lo dice todo: le han arruinado el año nuevo. Recibirá el 2020 clavado en un incómodo asiento de aeropuerto, en lugar de estar con su familia, como lo había prometido. Mientras más lo piensa, más intenta mentalizarse, buscar una cuota de calma para no perder la cabeza. Estaba rodeado de demasiadas personas, la calefacción brillaba por su ausencia y los nervios le jugaban muy en contra. Era como si la ansiedad estuviese llamando a su puerta para que le abra de una buena vez.
El anuncio de los altavoces se reiteraba a través de los parlantes distribuidos por todo el edificio. Él iba girando, identificándolos, como si estuviera girando en 360° una y otra vez, cuando iba a caer, dos brazos lo sujetaron.
—¿Estás bien? ¿Puedo ayudarte en algo?
El acento australiano de la fémina llamó su atención, entonces sus ojos la buscaron, incluso si en realidad, la tenía en frente. Cejas tupidas, cara redonda, mejillas prominentes y labios color durazno. Parpadeó un par de veces. Parecía de raíces coreanas, como él.
Las manos de la chica aflojaron y lo liberaron después de unos segundos. No estaba segura de si hacía bien en haber llamado su atención de ese modo, pero sí podía leerse la preocupación en su semblante.
—Lo siento mucho... ¿Te choqué? No vi por dónde iba.
—No, en realidad te vi hace dos minutos atrás y a juzgar por tu semblante tras la noticia, creí que estabas hiperventilando o entrando en algún ataque de pánico o de...
—Ansiedad —dijeron a coro—, tengo ansiedad. —Explicó él finalmente, sin vergüenza ni intenciones de maquillar la realidad.
—Vale, ¿te parece que tomemos asiento? Podemos intentar el ejercicio de respiración. Traigo una botella de agua conmigo también.
Él asintió. Era un milagro que hubiera tanto espacio en el cual ponerse cómodos, más aún, con tomacorrientes disponibles para su uso. Y es que la gran mayoría de los pasajeros se amontonaban para pedir explicaciones. Incluso si el mensaje había sido muy claro.
La nieve no da tregua. Cuando se pone tan peligrosa como para volverse una tormenta, es parte del protocolo de seguridad cancelar los vuelos y posponerlos para cuando se pueda despegar sin ningún tipo de riesgo latente.
—Mi nombre es Roseanne —se presentó con una media sonrisa—, ¿vives aquí?
—Jimin —saludó tras haber dado un breve sorbo a la botella—, sí. Mi familia me está esperando en Seúl para pasar año nuevo con ellos. Me recibí de profesor y bueno, antes de empezar a trabajar, quería pasar unos días con ellos.
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24 horas en nueva york ─ pjm + pcy ♡
Короткий рассказDonde Park Jimin conoce a Park Chaeyoung en el aeropuerto, ambos varados por 24 horas por una tormenta de nieve que obliga a las aerolíneas a cancelar todos sus vuelos. #ONESHOT: JIROSÉ. Historia original. Por favor, no la robes. Esta historia tie...