« ¡no es espiar! »

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Rusia estaba sentado en el sillón mientras chateaba con México por Whatsapp, habían acordado verse hoy a las 5pm.

Le diría a Estados Unidos que iba a ir con Alemania a organizar algunas cosas y el solo le diría que si, pero en caso que le dijera que no simplemente se iría, le daba igual la opinión del americano.

(...)

Ya eran casi las 5 y iba peinado y arreglado a el lugar donde acordó con México.

Le dijo a Estados Unidos la excusa y el lo dejó ir, que ingenuo era.

Mientras caminaba pensaba en el americano.

"Que idiota, aún no se da cuenta de que lo engaño..."

"Debería dejarlo pronto."

"Nunca sale, es un asocial."

Pensaba todo eso, pero volvió a la realidad y se dio cuenta que había llegado a su destino, visualizó a México a lo lejos y se acercó a él.

— Hola cariño — le dio un corto beso en los labios —.

— Hola mi amor~ — le agarró la mano y comenzaron a caminar —.

— ¿A dónde te gustaría ir primero?

— Pues...

Comenzaron su cita y todos los países de alrededor los veían confundidos, creían que Rusia estaba saliendo con Estados Unidos y México con Venezuela.

Pero entre esos países se encontraba una japonesa triste, no por desamor, sino por su amigo; Estados Unidos. Tomaba foto a lo que veía y seguía a la "pareja".

Rusia y México entraron a un restaurante, fueron a la feria, después al cine y como ultimo lo dejó en su casa, dándole un beso apasionado para después irse a la suya, hicieron todo lo que él jamás hace con el americano. La japonesa tomó fotos de cada una de las escenas.

Japón no iba a dejar que a su amigo le fueran infiel cuando este tenía tanto amor para dar.

Ella tenía en cuenta que el americano sabía que Rusia le era infiel, pero lo amaba tanto que no le decía ni le reclamaba sobre nada, ella sabía todos los secretos del americano, que lloraba todas las noches, que no sabía que hacer, que algunas veces pensaba en suicidarse pero realmente no quería, no podía. Y todo por ese maldito ruso al cual terminó agarrándole mucho rencor.

El americano no merecía eso, claro que no. Pero el tiempo lo resuelve todo ¿No? Pues para Japón no era así, ella le iba a abrir los ojos a su amigo, no quería que sufriera mas, ya que sabía el plan del ruso...

El ruso solo quería romper su corazón, él realmente no amaba al americano, era solo un juguete.

i don't care; rusame, mexvene.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora